La ola de calor registra máximas de récord en mayo, con casi 37 grados

Ponent registró ayer una nueva jornada de calor intenso, con temperaturas de plena canícula estival debido a la llegada de una masa de aire africano. En municipios como Mollerussa, el Servei Meteorológic de Catalunya llegó a registrar a primera hora de la tarde una máxima de 36,8 grados, convirtiéndose en la tercera de Catalunya después de Cardona (37º) y Artés (36,9º). El ranking de máximas lo completaron Alfarràs, Organyà, Castellnou de Seana y Lleida, que también superaron los treinta y seis grados.

Según los expertos, se trata de un episodio de calor récord en mayo, superando de lejos la temperatura más alta alcanzada en este mes en la ciudad de Lleida en los últimos 82 años, desde que existen registros. De hecho, el calor extremo supone un incremento del peligro de incendios forestales, por lo que el departamento de Agricultura elevó ayer el nivel 2 del Plan Alfa a ocho comarcas leridanas: el Segrià, Les Garrigues, la Noguera, el Urgell, el Pallars Jussà, el Alt Urgell, el Solsonès y la Segarra. En esta última, los Bomberos de la Generalitat sofocaron un incendio de vegetación agrícola que calcinó 1.200 metros cuadrados de forraje segado en un campo de Sant Pere dels Arquells, en el municipio de Ribera d’Ondara.

El aviso se recibió a las 13.18 horas y hasta el lugar se desplazaron dos dotaciones de los Bomberos que rápidamente apagaron las llamas. En Fraga, el viento y el calor también propiciaron ayer por la tarde la propagación de un incendio de cañas en una finca sin cultivar. El fuego se declaró a las 17.48 horas y los Bomberos trabajaron en su extinción con un helicóptero.

Cabe destacar que, hasta el 15 de octubre, la Generalitat prohíbe encender fuego en terreno forestal. La norma para prevenir incendios regula que, en los terrenos forestales y en la franja de 500 metros que les rodea, no se puede encender fuego sea cual sea su finalidad. La previsión es que durante la jornada de hoy se alcance un pico de altas temperaturas que podrían superar los 37 grados en algunos puntos de la provincia.

Ante esta situación, el departamento de Salud y Protección Civil piden extremar las precauciones para evitar golpes de calor. Recomiendan a la población mantenerse hidratado, evitar salir a la calle durante las horas de más sol, ventilar y refrescar los hogares, así como tener especial cuidado de los colectivos más frágiles como son los niños y las personas mayores. Por su parte, el ayuntamiento de Lleida ha reforzado las llamadas del servicio de teleasistencia por medida preventiva por el calor.