PARTIDOS JUNTS PER CATALUNYA
Postius tendrá a la diputada en el Parlament Cristina Casol y la activista trans Pérez-Pallarès como rivales para ser alcaldable en Lleida
Esta se presenta a las primarias en la capital, al igual que la activista trans Sílvia Pérez- Pallarès || Ahora deben recabar los avales de al menos el 20% de asociados
Las primarias de Junts per Catalunya para elegir a su alcaldable en Lleida tendrán tres candidatos. El actual primer teniente de alcalde y número uno en 2015 y 2019, Toni Postius, tendrá como rivales a la activista trans Sílvia Pérez-Pallarès (cuyo nombre artístico es Sílvia Sicore) y a la que se perfila como su gran contrincante, la diputada al Parlament Cristina Casol, que fue la última en presentarse antes de que ayer acabara el plazo. Los candidatos tendrán una semana para recabar los avales del 20% de los asociados.
Si al menos dos lo logran, habrá otra semana de campaña antes de la votación. Postius, que afronta una competencia que parecía improbable hace unas semanas, manifestó que “poder confrontar distintos modelos de ciudad enriquece y fortalece al partido”. Afirmó que “hace tres años iniciamos un cambio histórico en la ciudad”, señaló que en el gobierno ha impulsado “grandes proyectos de ciudad” como el polígono de Torreblanca o la nueva estación de buses, y recordó que en las dos anteriores elecciones siempre ha mejorado resultados y que en las últimas Junts quedó a 2.000 votos de ser la primera fuerza.
Por su parte, Casol indicó que ha dado el paso porque “pienso que puedo ser una buena alternativa, Lleida tiene un potencial tremendo y el modelo que hay ahora no es el que se merece”, en una crítica implícita a Postius. Señaló que aunque formalmente es vecina de Bellpuig, de donde es su marido, “soy hija de Lleida, he estudiado y trabajado en Lleida y duermo en Lleida de lunes a viernes”. Casol añadió que lidera la corriente socialdemócrata de Junts y que numerosos vecinos y asociados le animaron a presentarse.
Pérez-Pallarès, que a priori apenas parece tener posibilidades, dijo que “no voy contra nadie”, que forma parte de una corriente que cree que hay que hacer algunos cambios y no descartó llegar a un acuerdo con alguno de sus rivales.