'Obicham TE': Lleida borra una de las pintadas más icónicas de la ciudad

Las obras de reparación de la pasarela de los Institutos de Lleida, sobre la LL-11, han borrado uno de aquellos símbolos escondidos de la ciudad de Lleida. Un símbolo en forma de pintada que realizó el año 2013 un joven búlgaro de 17 años de la ciudad, Aleksandar Radskov. En la pintada se podían leer las palabras “Obicham Te CC”, que en búlgaro significa “Te quiero, C.C.,” dirigido a su novia Claudia (que respondía a las iniciales C.C.), que como el mismo Aleksandar estudiaba al Instituto Gili i Gaya, y que vería cada día esta declaración incondicional de amor.

El giro dramático llegó el 8 de junio del 2013, pocos días después de realizar la pintada, cuando el joven Aleksandar moría en un accidente de tráfico en Alfarràs. La moto en la que viajaba como pasajero invadió el carril contrario en una curva e impactó contra un todoterreno. El conductor de la motocicleta, de 16 años, resultó herido grave. El joven Aleksandar Radkov estudiaba primero de bachillerato y llevaba dos años viviendo en Lleida. Era un emprendedor, puesto que con sólo 17 años ya había montado una empresa, Feeling Projects, especializada en plataformas web y aplicaciones para dispositivos móviles.

El 14 de junio del 2013 una noticia del SEGRE contaba la historia de Aleksandar y su pintada, y que vecinos de la familia del barrio de Ciutat Jardí trataban de ayudar a la familia a repatriar el cuerpo del joven en Bulgaria a través de una recolecta de dinero. Al día siguiente de su muerte, el ayuntamiento archivó la denuncia por la pintada, mientras un grupo de personas reclamaban por las redes sociales de forma conjunta que no se borrara la pintada, ya convertida en icónica. Vidal Vidal hablaría de ello pocos días después en SEGRE. Escribía, Vidal, que era “una historia realmente conmovedora, digna del Moccia más sensible y emotivo. Me pregunto qué debe sentir la interpelada, alumna del instituto Gili i Gaya, cada vez que pasa cerca y lee el mensaje póstumo. Una campaña, que suscribo de todo corazón, reclama que la inscripción no sea tapada por los servicios municipales, a fin de que quede visible cuanto más tiempo mejor aquella declaración sentimental sencilla y directa, la cual sólo tienen derecho a borrar las gotas de lluvia, lágrimas del cielo para un amor ya inmortal”.

Finalmente no han sido las gotas de lluvia, si no los trabajadores de la empresa adjudicada que, en la reparación del puente, han repintado la estructura metálica original de color azul turquesa, con la icónica pintada, por el color burdeus. Lleida dice adiós, nueve años después, a uno de los actos incívicos más conmovedores que se recuerdan. Ahora ya será eso, un recuerdo. Un símbolo del amor que quedará ya sólo en la hemeroteca.

Las obras han tenido un coste de 65.572 euros y han reparado el puente, que recibió un daño importante como consecuencia de un accidente de tráfico el año 2020.

Aleksandar Radkov y su socio David González, en las oficinas de su empresa Feeling Projects de plataformas web y aplicaciones de móvil. 2013