Los jueces dictan un 58% menos de sentencias en catalán en ocho años

“El catalán está en una situación de plena emergencia”, señaló la conselleria de Justicia, Lourdes Ciuró, en un acto en la Seu Vella el pasado mes de abril. Entonces presentaba el nuevo portal jurídico catalán Compendium.cat ante la necesidad de incrementar el uso de esta lengua en los tribunales. Las estadísticas son claras y muestran un claro retroceso en el uso del catalán en los juzgados.

Según los datos de la conselleria, en los últimos ocho años los jueces leridanos han dictado un 58% menos de sentencias en catalán, mientras que los fallos en castellano han ido en aumento. Concretamente, en 2013 se redactaron 3.372 sentencias en catalán en los órganos judiciales de la provincia de Lleida, lo que representa el 30% del total de sentencias. Ocho años después, en 2021, esta cifra pasaba a representar solo el 10,9% del total de fallos de los jueces leridanos, hasta un total de 1.419.

Si se analizan las cifras, el año pasado se dictaron más sentencias en catalán, pero perdían peso en el conjunto de la jurisprudencia redactada en los tribunales leridanos. Si en 2021 representaron el 10,9% del total, un año antes eran el 11,4% y en 2019, antes de la pandemia, el 11,6%. Una cifra muy lejana a la de 2013, cuando eran tres de cada diez sentencias en catalán o en 2014, que era el 25% del total.

Pese a este retroceso, Lleida es la segunda provincia catalana con mayor porcentaje de sentencias en catalán, con Girona a la cabeza, representando el 16% del total. También está por encima de la media catalana, que no llega al 7%. Hace una semana, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya, Jesús María Barrientos, lamentó ante el Parlament que el uso del catalán en la administración de Justicia es “manifiestamente deficitario”.

También explicó que solo en el 14% de las demandas quien las interpone marca el catalán como lengua preferente para relacionarse con la administración de Justicia. Por ello, consideró que es necesaria “una mentalización general de todo el sistema de colaborar con la Justicia” para utilizar más el catalán en los tribunales. Una intervención, sin embargo, que cosechó críticas a Barrientos por utilizar el castellano en su intervención.

Cabe recordar que la conselleria de Justicia ha creado becas de casi mil euros mensuales para potenciar que graduados en Derecho catalanes opositen a jueces y fiscales.

Los jueces de paz tramitaron 52.802 actuaciones el año pasado en LleidaLos 224 jueces de paz de las comarcas leridanas tramitaron durante el año pasado un total de 52.802 actuaciones, lo que supone un incremento de cerca del 10% respecto a 2020. Según los datos de la conselleria de Justicia, del total de actuaciones durante el año pasado en los juzgados de paz de la provincia, 13.004 fueron del ámbito civil, 10.698 del ámbito penal y 29.100 del Registro Civil.

En las últimas semanas Justicia está recabando apoyos municipales para defender la figura del juzgado de paz y evitar la eliminación que pretende la ley orgánicade eficiencia organizativa delServicio Público de Justicia que prepara el Gobierno central. Hasta el 20 de junio, la consellera Lourdes Ciuró se reunirá con jueces de paz de toda Catalunya para promover una acción conjunta y defender su continuidad. El pasado miércoles, señaló que “la figura del juez de paz no puede dejar de existir en los municipios y en las ciudades más pequeñas”, ya que sus habitantes “no deben ir al pueblo de al lado a trasladarse 30 kilómetros para tener una oficina de justicia”.

Según Ciuró, los jueces y juezas de paz representan un valor fundamental ya que “promueven la convivencia y acercan la ciudadanía a la justicia”. En este sentido, afirmó que la supresión de esta figura representaría, además, “un problema para el modelo de justicia de proximidad que defendemos”. Por ello, el departamento defiende presentar mociones en los plenos municipales y busca apoyos para una moción parlamentaria.

Los jueces de paz están presentes en 898 de los 947 municipios catalanes y son la estructura judicial más amplia de Catalunya.