Denuncian acoso y desperfectos en la propiedad del campesino de la partida de Llívia
Los vecinos se quejan por las molestias causadas por las furmigaciones y el agricultor se ha comprometido a no aplicar productos fitosanitarios de 8h a 22h
Unió de Pagesos ha explicado esta mañana en rueda de prensa que la aplicación de productos fitosanitarios en la partida de Llívia, en el término municipal de Lleida, no afecta en ningún caso a la salud humana, ya que el campesino que la hace cumple la normativa europea de uso sostenible de productos fitosanitarios, que recuerdan que es la más exigente de todo el mundo y además estos productos están autorizados por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria y la agencia correspondiente estatal.
Se tiene que acordar que los vecinos de un bloque de edificios de la calle Camí del Nord denunciaron a finales de junio molestias de ruidos y gases dentro de las viviendas, además que el agricultor cada vez fumiga más días.
En la rueda de prensa también ha comparecido el campesino afectado, Guillem Miranda, que se ha comprometido a no aplicar productos fitosanitarios en el campo de 8h a 22h y a avisar a los vecinos cuando tenga que aplicar el tratamiento -cada 10 días aproximadamente- para que puedan cerrar las ventanas en caso de molestias. El Comú de Lleida propone mejorar la regulación de la aplicación de productos fitosanitarios en zonas urbanas y adyacentes, teniendo en cuenta criterios de protección de la salud de las personas.
Por otra parte, sindicatos agrarios como Unió de Pagesos denuncia el acoso al campesino con algunos desperfectos en la propiedad. El sindicato pide a todas las partes en el conflicto, grupos políticos locales incluidos, a no menospreciar el oficio del campesinado, a entender el habitual ciclo de las prácticas habituales en el campo y aprovecha para reivindicar el sector agrícola como estrategia social en beneficio de la soberanía alimentaria. UP remarca que el campesino anuncia con un cartel que no se puede entrar en el campo cuando aplica productos fitosanitarios, observando el Real Decreto de limitación del uso de productos fitosanitarios y además se ha comprometido a no aplicar estos productos entre las 22 h y las 8 h, observando el Plan general de Lleida de ordenación urbana y territorial respecto de las normas de ruidos.
Miranda considera que la polémica "no tiene sentido" y recuerda que él aplica los fitosanitarios cuando se lo dicen los técnicos. El problema, explica, es que con la ola de calor se han visto "obligados" a trabajar de noche. Después de la polémica, Miranda ha estado hablando con el concejal del Horta del Ayuntamiento de Lleida, David Melé, que ha mediado en este problema y finalmente ha decidido limitar su actividad "con buena voluntad" y para evitar conflictos con los vecinos aunque recuerda que los productos que utiliza son "totalmente legales y autorizados".
A raíz de la polémica, el Comú de Lleida envió un comunicado en que exponía que en este caso particular, parte de la finca es suelo urbano y se destinó a construcción de pisos, manteniendo actividad agraria en el otro lado de la calle, que también es zona urbana. Es por eso que proponen un cambio en la forma de aplicar los pesticidas, regulando distancias mínimas, sistemas de aviso, formas de aplicación o tipo de producto para evitar conflictos y mejorar la protección de la salud. En este sentido, sin embargo, Miranda recuerda que "mi campo no ha crecido, han sido los bloques de pisos que han crecido hacia mí".
Por otra parte, el sindicato ASAJA Lleida considera un "despropósito" la propuesta del Comú de Lleida y denuncia el "desconocimiento" del grupo municipal con respecto a la normativa de los fitosanitarios que se aplica a Cataluña y España, y que viene regulada desde Europa. Además, recuerdan que la aplicación de los productos fitosanitarios a partir del mes de mayo se tiene que hacer cuando las temperaturas no son altas y que todos los productos fitosanitarios que aplica el sector productor de fruta dulce están homologados por la UE y permitidos con una normativa estricta.