INFRAESTRUCTURAS INDUSTRIA
El polígono de Torre Solé estará listo a finales de año y ya ha vendido un tercio de sus fincas
El complejo de titularidad privada que se está construyendo al pie de la Ll-11 ya ha cerrado la cesión de 70.000 metros cuadrados || Tendrá 36 hectáreas, de las cuales 23 se utilizarán para acoger empresas
El nuevo polígono industrial de titularidad privada de Torre Solé, al pie de la Ll-11 y junto a la variante sur, estará listo a finales de año. Actualmente, ya se ha completado el movimiento de tierras y las obras del alcantarillado y ahora comenzarán los trabajos de urbanización de las calles. Mientras, ya se ha cerrado la venta a varias empresas de 70.000 metros cuadrados, casi la tercera parte del total de la superficie disponible, y hay operaciones en marcha que podrían comportar la venta de otros 30.000, según informaron fuentes de Finques Farré, responsable de la comercialización.
Las obras de urbanización del complejo industrial comenzaron el pasado año con un presupuesto previsto de unos 7 millones de euros. El nuevo polígono tiene una superficie total de 36 hectáreas, de las que 23 serán las que quedarán disponibles para acoger empresas. Su nombre procede de la casa de estilo modernista que está situada dentro del mismo.
Estaba llena de pintadas y en mal estado y ha sido adecuada. En cuando a las dimensiones de las parcelas, el futuro polígono ofrecerá terrenos de un mínimo de 5.000 metros cuadrados y un máximo de 50.000, tamaño que no está disponible en los polígonos ya existentes. Los promotores comercializan el suelo, ya que la construcción de las naves irá a cargo de las empresas que se instalen.
El plan de urbanización de la zona incluye fibra óptica y una instalación de autoconsumo compartido de energía solar. Contará con paneles situados en un único lugar y cada empresa dispondrá de una conexión en función de sus necesidades. Está previsto que esta pequeña planta fotovoltaica suministre el 30% de la energía necesaria.
Los trámites urbanísticos se tramitaron más rápido de lo habitual porque hace una década la administración ya dio luz verde al planeamiento promovido por una constructora local. Sin embargo, entonces no llegó a desarrollarse a causa de la crisis. La construcción de este polígono ha sido marcada como una necesidad para Lleida, ya que, según aseguraron en su momento fuentes de la comercializadora de los terrenos, este será el único polígono disponible a corto plazo en la capital para cubrir la demanda actual, a la espera que se haga el de Torreblanca i Quatre Pilans (ver desglose).
Sobre el perfil de empresas que vendrán, se espera que las principales interesadas sean firmas del sector de la logística y el transporte, así como otras con potencial de crecimiento.
La Generalitat prevé iniciar en 2023 las obras del de Torreblanca
La construcción del polígono de Torreblanca i Quatre Pilans, que se hará junto a la carretera N240 en dirección a Tarragona y tendrá una superficie de 430 hectáreas, es el principal proyecto que el Institut Català del Sòl (Incasòl) está llevando a cabo en Lleida ciudad y la Generaitat prevé que las obras para preparar y urbanizar los terrenos podrían iniciarse el año que viene, poco antes de las elecciones municipales, y tendrán una duración aproximada de un año. Más de la mitad de su superficie, unas 240 hectáreas, serán de titularidad pública y la parcelación del terreno se adaptará a las necesidades de las empresas interesadas.
Una de estas firmas es la cadena de supermercados leridana Plusfrec, que está gestionando con el Incàsol y el ayuntamiento la compra de una finca de 60.000 metros cuadrados para construir una nave de 32.000 y estima que creará medio centenar de puestos de trabajo.