La tasa por recogida de residuos en solares vacíos genera polémica

Propietarios de los solares vacíos que hay en Lleida han empezado a poner recursos judiciales ante la tasa municipal que la Paeria recauda por la recogida, transporte y tratamiento de residuos municipales. La consideran ‘injusta’ porque aseguran que sus propiedades no generan desechos, más allá de las malas hierbas que siegan una o dos veces al año. El estado de los solares depende en gran parte de su ubicación, ya que los del centro histórico están mucho más sucios que los de la periferia.

De hecho, este junio hubo incendios en uno del centro y otro de Balàfia. La medida impositiva se aprobó en 2016, cuando los locales comerciales inactivos y los solares sin edificar se añadieron a la tasa que ya pagaban las viviendas particulares. Los dueños de los terrenos debían darse de alta en el ayuntamiento para pagar el impuesto, pero hasta 2020 la Paeria solo cobró las tasas de unos 50 solares de los más de 250 que debían liquidar el tributo porque de los 700 existentes están exentas las parcelas cedidas al ayuntamiento para usos comunitarios y aquellas que salgan de los límites del término municipal.

Debido al acuerdo entre ERC, Junts y el Comú, en octubre de 2021 se aprobó un aumento del impuesto de los 96€ a los 200€ anuales por cada 1.000 metros cuadrados de superficie, y con la nueva revisión catastral se empezó a requerir los pagos a los propietarios que no tributaban, con un carácter retroactivo que legalmente está fijado en 4 años. No se aplica ningún recargo o interés, pero desde la Paeria consideran importante que se regularice la situación para no mantener agravios entre unos propietarios y otros.Por otra parte, otros de los problemas que tiene la ciudad es el vertido de basuras fuera de los contenedores en los barrios donde se implementa el puerta a puerta, que son Ciutat Jardí y una parte de Pardinyes y Balàfia. Los vecinos se quejan de tener que guardar la basura en casa durante varios días en pisos pequeños.

El concejal de Transición Ecológica, Jaume Rutllant, asegura que el balance es positivo aunque admite que hay que perfeccionar el sistema. La previsión es que se acabe de implementar en todo Pardinyes y Balàfia el año que viene, y a partir de 2024 en el resto de la ciudad de forma progresiva. A partir del año que viene, también habrá recargos de un 40% en la tasa de basuras por actos incívicos, así como bonificaciones del 20% a quienesy utilicen bien el servicio.