La nueva UCI Neonatal del Arnau permite que padres y madres estén junto a sus hijos las 24 horas

El conseller de Salud, Josep Maria Argimon, ha inaugurado este miércoles la nueva UCI Neonatal del Hospital Universitario Arnau de Vilanova de Lleida, ubicada en la quinta planta del centro. Consta de boxs individuales para cada bebé donde, además del equipamiento necesario para la atención médica, hay un espacio para que madres y padres puedan estar junto a sus hijos las 24 horas y participar en sus cuidados. Las instalaciones, adaptadas a los estándares recomendados actualmente, disponen de 8 camas de cuidados intensivos y 8 de cuidados intermedios. La Unidad Neonatal de Arnau recibe unos 400 ingresos de bebés al año. Las obras de reforma han comportado una inversión de unos 2 millones de euros que han sido financiados por la Diputación de Lleida.

La Unidad de Neonatología del servicio de Pediatría del Arnau de Vilanova se ha reformado completamente con el objetivo de dotar al hospital de un servicio de cuidados intensivos e intermedios neonatales adecuado a los estándares recomendados actualmente. Estos estándares ponen a la familia en el centro del proceso y fomentan la participación activa de madres y padres en el cuidado del bebé desde su nacimiento. Para facilitar esta participación, la nueva Unidad cuenta con 16 habitaciones familiares (14 individuales y 2 dobladas para gemelos), donde además del equipamiento necesario para la atención médica, hay espacio para que madres y padres puedan estar al lado de sus bebés las 24 horas y participar de sus cuidados. Concretamente, existen 8 habitaciones para cuidados intensivos y 8 para cuidados intermedios.

Durante la inauguración, el conseller Argimon ha destacado que se trata de unas instalaciones "modernas y modélicas" en las que "se ha buscado la intimidad y la humanización, una tendencia que se sigue en muchas UCI neonatales y de semicríticos, que buscan la convivencia de los padres con el bebé", porque "el cuidado y el acompañamiento son básicos desde un inicio", ha dicho. Por ello, "a diferencia de muchas UCI de adultos, donde hay cristales y puedes ver a la persona que hay dentro, en ésta hay paredes que facilitan esta intimidad", resaltó el conseller de Salut.

La UCI neonatal también cuenta con una sala de descanso para padres y madres habilitada con mesa, microondas, armarios para guardar pertinencias personales, aseo y ducha. Por su parte, los controles de enfermería quedaron integrados en los pasillos y todas las habitaciones están dotadas con cámaras de videovigilancia de los pacientes. La Unidad cuenta también con un box de aislamiento con presión positiva y negativa, pensado para pacientes inmunodeprimidos o infecciosos, con extracción de aire independiente y aislado del resto de habitaciones.

La remodelación también ha permitido habilitar un pasillo lateral de servicio que proporciona un acceso alternativo por una zona no asistencial, así como un 'office' para profesionales, una sala de reuniones para facultativos y un nuevo espacio de telemedicina, para prestar asistencia a las familias por teléfono o videollamada una vez se van a su domicilio. A pesar de la remodelación total de la unidad, se ha mantenido el suelo original del hospital, inaugurado en 1956, como rasgo distintivo del edificio.

Eduard Solé, director clínico territorial de Pediatría de Lleida, ha afirmado que "proporcionar una asistencia no sólo altamente tecnificada sino también atenta a las necesidades de desarrollo de los bebés y de su familia supone menos días de ingreso, menos complicaciones al alta , menos secuelas a medio y largo plazo y mayor calidad, humanización y respeto para los bebés y sus familiares". El servicio de Pediatría del Hospital Universitario Arnau de Vilanova atiende cada año a alrededor de 2.400 bebés, de los que 400 requieren ingreso en la Unidad de Neonatología, la mayoría por problemas derivados de la prematuridad. Argimon ha remarcado que la renovación de esta Unidad es una "punta de lanza de una serie de mejoras que en Arnau, como hospital de referencia que es de toda la región sanitaria y como uno de los grandes hospitales de Catalunya, ha ir transformando y mejorando en los próximos años y meses".

Tanto las obras como el equipamiento de la nueva Unidad de Neonatología han sido financiadas por la Diputación de Lleida con un presupuesto de unos 2,3 millones de euros. En este sentido, el presidente de la diputación leridana, Joan Talarn, ha destacado la apuesta de la institución por mejorar la atención sanitaria en el territorio y para que Arnau de Vilanova sea un hospital de referencia para los leridanos y para el país.