Le piden dos años de cárcel por dar un codazo a un mosso

La Fiscalía solicitó ayer una condena de dos años de prisión para un joven acusado de dar un codazo a un agente de los antidisturbios de los Mossos d’Esquadra al finalizar una concentración de protesta ante los juzgados Canyeret que tuvo lugar el 15 de octubre de 2019 en apoyo a los investigados por la okupación del Rectorado de la Universitat de Lleida (UdL) en 2016. La vista se celebró en el juzgado de lo Penal 3. El acusado negó que agrediera a un agente de los ARRO y explicó que “participaba en una concentración pacífica cuando empezaron a llegar los antidisturbios con las porras.

Yo iba andando y a la altura del Col·legi de Arquitectes uno de los policías me dio el alto. Me cogió el móvil, me pidió que le diera la contraseña para desbloquearlo y me amenazó con detenerme si no lo hacía. Me negué pero no le pegué ni me resistí aunque me acabaron arrestando”.

En cambio, el agente, que declaró en calidad de testigo, afirmó que “bajábamos con la furgoneta desde la zona del colegio Cervantes y el jefe del operativo nos pidió que identificaron a los concentrados que se iban corriendo. Al darle el alto a uno de ellos, el acusado, me dio un codazo en el pecho para intentar huir pero mi compañero pudo retenerlo”. El otro agente ratificó esta versión.

También declararon otros dos jóvenes que participaron en la protesta y que también fueron identificados. Ambos negaran que el acusado golpeara al agente. La defensa pidió la absolución.

Antes del juicio, medio centenar de personas, convocadas por la Plataforma Antirepressiva de Ponent, se concentraron en el Canyeret en apoyo al joven acusado.