FRUTA
UP alerta de que la inflación en la alimentación afecta al sector de la fruta dulce en una campaña que califica de nefasta
El sindicato denuncia que el exceso de burocracia por parte de las administraciones pone en peligro el futuro del sector
Unió de Pagesos (UP) ha alertado de la grave afectación que tiene para el campesinado de fruta dulce la inflación en la alimentación, ya que considera que el aumento del precio que tiene que pagar el consumidor para comprar fructifica fresca puede hacer bajar el consumo. Por el contrario, los precios que recibe el agricultor se mantienen parecidos a los del año pasado. Delante de eso, reclaman la retirada de fruta del mercado, ya que señalan que las cámaras frigoríficas están llenas de fruta con malformaciones y calibres pequeños, que tienen un precio bajo, mientras que el coste de la energía para conservar esta fruta se ha doblado. El sindicato ha calificado la campaña de la fruta dulce de este año de nefasta y denuncian un exceso de burocracia por parte de las administraciones.
Unió de Pagesos ha hecho un llamamiento a las organizaciones de productores de fruta dulce para que hagan retiradas de producto del mercado para distribución gratuita. Y es que los precios en origen se han mantenido iguales que el año pasado, mientras que, por el contrario, los costes de la energía se han doblado y el calor del verano ha hecho que la fruta se haya quedado más pequeña del habitual.
"Las cámaras tienen mucho producto pequeño, los costes de frigoconservació se han doblado y si no hay una retirada inmediata de estos productos de las centrales los campesinos no acabarán cobrando nada", ha explicado el responsable de Fruta Dulce de UP, Jaume Gardeñes.
El sindicato ha hecho balance de la campaña de la fruta dulce de este año en el marco de la 68.ª Feria de Sant Miquel de Lleida y 37.ª de Eurofruit. Una campaña que han calificado de nefasta y que ha sido marcada por el aumento de los costes, la caída de la producción a causa de la climatología y la guerra en Ucrania. En concreto, Gardeñes ha indicado que las heladas de abril afectaron al sector de la fruta de pepita en un 80%, mientras que la afectación en fruta de semilla llegó al 70%, con calibres pequeños y fructifica de mala calidad.
También sobre las heladas, han valorado positivamente la ayuda directa que ha articulado el Departamento de Acción Climática y que han solicitado un total de 17.200 hectáreas. Sin embargo, critican el requisito obligatorio para poder acceder, que marca que la explotación se tiene que asegurar durante los próximos 5 años y que, según el responsable de Fruta Dulce de Unión de Uniones, Josep Cabré, ha hecho que "la mayoría o la mitad de los campesinos" no la hayan pedido.
Aparte de una campaña complicada en el ámbito económico, Cabré ha afirmado que "moralmente todavía ha sido más difícil" por los requisitos burocráticos que aumentan año tras año y que, junto con el aumento de los precios de producción y la bajada de kilos de fruta, van "en contra la ilusión de los campesino fructicultor".
En la misma línea se ha expresado el coordinador comarcal del Segrià d'UP, Néstor Serra, que también ha criticado el exceso de burocracia que cada vez más tienen que cumplir los productores y que, en cambio, contrasta con la "lentitud" de las administraciones a la hora de pagar ayudas. "Con la burocracia van rapidísimos, pero con las ayudas hay planes del 2019 que todavía se tienen que cobrar", ha expuesto y ha alertado de que si la administración no cambia las políticas "de aquí cuatro días aquí no quedaremos a nadie".