LEGISLACIÓN REFORMA
Entra en vigor la ley que convierte los abusos sexuales en violaciones
El consentimiento expreso será la pieza clave para juzgar estos delitos || Las víctimas ya no tendrán que demostrar que han sufrido violencia o que se han resistido
La ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual, que elimina la distinción entre abuso y agresión y regula la necesidad del consentimiento expreso, entró en vigor ayer después de que fuera aprobada el pasado 25 de agosto por el Congreso de los Diputados. La conocida como ley del “solo sí es sí”, que fue publicada hace un mes en el Boletín Oficial del Estado (BOE), reforma el Código Penal y establece que todo acto que atente contra la libertad sexual de otra persona sin su consentimiento es una agresión sexual castigada con pena de prisión de 1 a 4 años. El consentimiento expreso será la pieza clave para juzgar los delitos sexuales y se define de la siguiente manera: “Solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente, mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona”.
De esta manera, las víctimas ya no tendrán que demostrar que han sufrido violencia o que se han resistido para acreditar una agresión y se eliminan los abusos sexuales del Código Penal.La norma, que ve la luz cuatro años después de la polémica sentencia de La Manada que consideró abuso sexual la violación grupal a una joven en los Sanfermines de 2016, contó durante su tramitación parlamentaria con la oposición de PP y Vox.
La ley considera violación toda agresión sexual con penetración y la castiga con pena de prisión de cuatro a doce años. La pena máxima será de quince años en el caso de la violación y de ocho en el de la agresión sexual sin penetración cuando concurra alguna agravante, como la agresión en grupo, la violencia extrema o la especial vulnerabilidad de la víctima. Se introduce de forma expresa también como agravante el que se anule la voluntad de la víctima con fármacos o drogas (sumisión química) y que entre la víctima y el agresor haya existido o exista una relación de pareja. También se penaliza el acoso callejero.
Casi 300 casos denunciados el año pasado en Lleida
La comarcas de Lleida registraron el año pasado cerca de 300 denuncias por violencia sexual, según la última Memoria de la Fiscalía. Concretamente, hubo 131 agresiones sexuales en 2021 frente a las 76 de un año antes o 87 de 2019.
En el caso de los abusos, hubo 123, cuando en 2020 fueron un centenar de denuncias y 112 en 2019. Con esta nueva ley, todos estos abusos pasarán a ser agresiones sexuales. La Fiscalía atribuye el aumento a “que se confía más en la justicia” y una mayor concienciación.
En este sentido, en las últimas semanas se han celebrado tres juicios por abusos sexuales a menores en la Audiencia, dos de ellos intrafamiliares. El último tuvo lugar el miércoles. La Fiscalía solicita una condena de 5 años de prisión para un hombre acusado de abusar de su hijo de siete años.