EQUIPAMIENTOS POLÉMICA
El litigio por la vieja estación de buses afecta a sus vecinos
Edalsa ha pedido vetar el acceso al tejado|| Edificios adyacentes no pueden hacer obras o reparaciones en las fachadas interiores
El conflicto judicial entre el ayuntamiento y la sociedad que hasta marzo gestionaba la estación de autobuses de la calle Saracíbar, Edalsa, está provocando perjudicados colaterales: son los vecinos de los 13 bloques que rodean la terminal. Todo empezó el pasado 24 de marzo, el día en que la sociedad debía devolver la titularidad total del equipamiento a la Paeria. Edalsa se negó a ello, alegando que dos de las tres fincas registradas, las correspondiente a las oficinas y al antiguo restaurante San Bernardo, no formaban parte de la concesión.
Este hecho provocó que el ayuntamiento le abriera un expediente sancionador, a lo que la sociedad respondió presentando un recurso contencioso administrativo en el juzgado. Según informaron fuentes municipales, este recurso “incluía medidas cautelares que, como indican los vecinos, prohíbe el paso” a la zona de oficinas, impidiendo así poder acceder al tejado. A raíz de esta situación, la Paeria solicitó al juez que no se tuvieran en cuenta estas medidas para facilitar el acceso al tejado y, por el momento, están a la espera de la decisión judicial.
A la espera de este pronunciamiento sobre las medidas propuestas por Edalsa, el acceso a las oficinas está cerrado, siendo este el único acceso al tejado de la antigua terminal, ahora convertida en apeadero, por lo que los vecinos de los trece bloques que la rodean no pueden acceder a esa parte de la fachada de sus pisos para hacer obras, limpieza o instalar aires acondicionados. Una situación que ha provocado la indignación de muchos de ellos, que admiten no saber qué hacer para revertir esta situación.
El apeadero estará operativo hasta que la nueva estación, que se hará junto a la terminal de trenes, esté lista, lo que no será antes de 2024.
En estado ruinoso por la falta de mantenimiento
El primer día que la Paeria asumió la gestión del apeadero ya denunció el “estado deficiente, lamentable y ruinoso” en el que se encontraba por la falta de mantenimiento. Desde entonces la Paeria ha ido haciendo mejoras repintar los andenes y prevé hacer otras, como renovar las luces, antes de fin de año.