El servicio psicológico de la UdL atiende a casi el doble de alumnos a raíz de la pandemia

La Universitat de Lleida (UdL) dispone de un servicio gratuito de atención psicológica para sus alumnos que desde el curso 2011-2012 ha atendido a 557, con un total de 950 visitas, a razón de un máximo de tres por estudiante. La UdL solo dispone de datos por géneros a partir del curso 2018-2019 y reflejan que este servicio ha sido mucho más utilizado por mujeres (233) que por hombres (69). A raíz de la pandemia se disparó el malestar emocional del alumnado y de los 76 que requirieron atención psicológica en el curso 2019-2020 se pasó a 120 en el 2021-2022, indicó la responsable del servicio de Informació y Orientación Universitaria, Margarida Serveto.

En los momentos de restricciones más estrictas, el servicio se prestó de forma virtual. La psicóloga detectó un incremento de casos de ansiedad y estrés y organizó charlas generales en formato online para dar instrumentos al alumnado para saber gestionar la situación, en las que participaron unos 130 estudiantes. De hecho, en 2020 la UdL amplió de dos a tres el máximo de visitas psicológicas gratuitas virtuales o presenciales, antes de ser dirigidos a los servicios públicos, en caso de ser necesario.

Incluso atendió online sin límite de visitas a varias estudiantes Erasmus que estaban en Italia al inicio de la Covid y no podían salir de la habitación, explicó la coordinadora de Compromiso Social, Igualdad y Cooperación, Núria Camps. En todo caso sentido, ha constatado que el estudiantado prefiere el servicio de forma presencial.Asimismo, una decena de estudiandes de Medicina, colectivo que suele estar sometido a mucha presión, ha utilizado un servicio específico de atención a su salud mental que se está prestando como prueba piloto, gracias a un convenio con la fundación Galatea. La UdL ofrece también atención psicopedagógica desde hacer tres cursos a alumnos con trastornos de aprendizaje y comunicación, que acaban teniendo repercusión en su vida académica.

Suelen ser estudiantes de primero que acceden a la universidad con informes que acreditan que requieren una adaptación en la docencia y la evaluación. Además, la vicerrectora de Estudiantes, Montse Rué, afirmó que el Consejo Interuniversitario de Catalunya impulsa un estudio sobre la salud mental de estudiantes, docentes y personal de las universidades catalanas, que se iniciará en noviembre.