Cuenta atrás para el derribo de los silos de Pardinyes

Los trabajos previos para derribar parcialmente los antiguos silos del Senpa, situados entre las calles Xavier Puig i Andreu y Oriol Martorell de Pardinyes, para construir allí el albergue para temporeros ya han empezado y ayer se acordonó la zona y se empezaron a retirar escombros que había en su interior. Los trabajos de demolición afectan a uno de los grandes silos y a la antigua vivienda situada en el vértice superior de la parcela y los llevará a cabo la empresa Deltapunt 3000 SA, que se adjudicó el concurso convocado por el ayuntamiento por un presupuesto de 158.103,9 euros. Por el momento, los trabajos de la empresa se han centrado en adecentar el interior del recinto, que lleva años abandonado, retirando basuras y productos tóxicos, motivo por el cual los trabajadores iban con mascarilla, guantes y traje protector.

Trabajadores de la firma también acordonaron las instalaciones de los silos y colocaron carteles que prohíben la entrada a toda persona ajena a la obra y advirtiendo del riesgo de intoxicación si se incumplía esta orden. Inicialmente, el gobierno municipal preveía que el derribo se llevara a cabo antes de final de año, pero las labores de limpieza previa durarán unos días. Estos trabajos llegan veinte días después de que el ayuntamiento instalara estructuras en los demás silos para reubicar los nidos de cigüeña que están en el que se va a demoler.

Una actuación indispensable antes de proceder a la demolición, al ser una especie protegida, y que la Generalitat autorizó a hacer fuera de su periodo de nidificación, que es entre febrero y agosto. Para ello, la Paeria ubicó 11 estructuras hechas con troncos, malla de coco y paja para que las cigüeñas puedan anidar en los silos que no se tirarán y 8 en el parque de La Mitjana. Por su parte, desde la asociación de vecinos de Pardinyes (Orvepard) aseguraron que tomarán “las medidas legales necesarias” para frenar la demolición de los silos “en el momento en el que entre maquinaria al recinto”.

Así lo aseguró su presidente, Joan Torné, que criticó que la Paeria “no ha querido negociar el proyecto ni hablarlo”. Tanto Orvepard como la Fundació Barri de Pardinyes están en contra del plan del albergue, que ven sobredimensionado e impuesto por el ayuntamiento. No obstante, cabe recordar que en noviembre el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya rechazó parar la tramitación del proyecto del albergue después de que el Colegio de Arquitectos lo solicitara con un recurso.