Ponent tiene 57 encarcelados por homicidios, 8 más que el pasado abril

Uno de cada diez internos del Centre Penitenciari Ponent está cumpliendo condena o está pendiente de juicio por homicidio. Son ocho personas más que el pasado abril, según los datos estadísticos de ejecución penal de la conselleria de Justicia, actualizado a 11 de enero. Concretamente, la cárcel leridana alberga a 577 reclusos, de los que 57 lo están por asesinatos u homicidios.

De estos, 44 están cumpliendo condena –dos de ellos están pendientes de que la sentencia sea firme– mientras que hay 17 personas que están privadas de libertad preventivamente y pendientes de juicio. Son 55 hombres y dos mujeres. ¿Qué explica este aumento? Uno de los principales motivos es el aumento de crímenes que se registraron o se esclarecieron el año pasado en las comarcas de Lleida, uno de los peores de las últimas décadas.

Concretamente, hubo siete casos, a los que hay que añadir otros dos cometidos en 2021 que resolvieron y que han acabado con sus presuntos autores entre rejas. El último de ellos fue el feminicidio a principios de diciembre de una vecina de Balàfia. Por tipología de delitos, un 39,12% de los internos –223 personas– están en prisión por delitos contra el patrimonio como son los robos con violencia o intimidación o robos en viviendas y domicilios.

Se trata de una cifra similar a la que había hace un año. También hay otros 55 reclusos condenados o investigados por delitos contra la libertad sexual (violaciones y abusos sexuales) mientras que 50 lo están por violencia de género. Respecto a los delitos contra la seguridad colectiva (tráfico de drogas, seguridad vial o incendio), hay un total de 123 reos, lo que representa un 21,58%.

Respeto a otros ilícitos, hay 21 individuos internos por lesiones, 13 por delitos contra la administración de justicia y tres por tráfico de seres humanos, entre otros. En cuanto a la población reclusa total, hay 549 hombres y 28 mujeres. Es decir, las féminas son solo el 4,9%. Además, hay otras 92 personas que están acabando de cumplir su condena en el Centre Obert. Están en tercer grado. Otros 17 leridanos están en libertad condicional.

Justicia tiene previsto hacer una reforma integral

El Centre Penitenciari Ponent es una de las cárceles más antiguas de Catalunya. Aúna las antiguas Lleida-1, construida en 1954, y Lleida-2, levantada en 1984. La primera es de construcción radial y la segunda es un edificio modular. Ambas se integraron en 1991. Está previsto que la cárcel sea reformada de manera integral, aunque el proyecto está en una fase inicial. Así lo anunció el pasado mes de septiembre la entonces consellera de Justicia, Lourdes Ciuró, descartando así la posible construcción de una nueva cárcel en Lleida. También afirmó que se apostaría especialmente por la mejora del espacio para las mujeres. Para garantizar su mantenimiento, se han hecho actuaciones con una inversión de unos 2,8 millones de euros. Por su parte, los sindicatos de prisiones llevan muchos años denunciando el “deteriorado estado en el que se encuentra” y reclamando inversiones. Otra de las demandas en la falta de personal.

En el año 2007 llegó a superar los 1.100 internos

La cárcel leridana alcanzó en 2007 su récord histórico de población reclusa, cuando llegó a contabilizar 1.104 internos, superando con creces el límite de su ocupación (unas 1.000 personas). Desde entonces, el descenso fue paulatino debido a varios motivos como el aumento de las libertades condicionales (que se dan cuando se cumplen dos terceras partes de la condena), la expulsión de reos a sus países de origen o la reforma del Código Penal de finales de 2010 que supuso una reducción de la duración máxima de las penas para algunos delitos como los de salud pública (drogas). Es la única cárcel que hay en Lleida. Estaba prevista una en Tàrrega pero se descartó.