HORTA FAUNA
Los jabalíes también destrozan palmeras
Un agricultor en Sot de Fontanet que cultiva estas plantas ornamentales denuncia que los animales han arrasado su finca || “Tardan seis años en crecer, por lo que pierdes mucho dinero”
Xavier Samarra, un agricultor de la partida de Sot de Fontanet de l’Horta denuncia que los jabalíes han arrasado su finca de plantas ornamentales en la que cultiva palmeras y magnolias. En concreto, han arrasado la hectárea en la que tenía plantadas las palmeras más jóvenes, de un año. “Las palmeras tardan seis años en crecer, con lo que no solo pierdes las plantas, sino todo lo invertido en mano de obra para su cuidado y en productos fitosanitarios”, lamenta.
El propietario, que también es presidente de la asociación de vecinos de Copa d’Or, añade que “por suerte” las otras 4.500 plantas que ya estaban preparadas para la venta no se han visto afectadas y viajarán a los Países Bajos, donde exporta habitualmente, aunque también tiene clientes en Abu Dabi. Y es que las palmeras de Lleida, que pueden resistir temperaturas de hasta 20 grados bajo cero, son muy apreciadas porque el frío las hace más robustas, de mayor calibre, explica. Samarra también cultiva magnolias en l’Horta, que tardan diez años en crecer y pueden llegar a los cuatro metros de altura.
También las exporta a los Países Bajos. Esta empresa se ve ahora comprometida por los jabalíes. Samarra ha instalado una jaula que le ha cedido la Paeria para evitar que estos animales le causen más destrozos y se está planteando instalar vallas antifauna para proteger su propiedad.“Hay demasiados jabalíes.Los márgenes del río son un criadero”, señaló Samarra, que añadió que “hay que encontrar un punto de equilibrio para popoder convicir con la fauna y evitar su proliferación, como está ocurriendo con la plaga de conejos” (ver más información en la página 23)
El agricultor cree que hay que encontrar un equilibrio entre la fauna y los cultivos que hay en l’Horta
No es el único caso de destrozos provocados por jabalíes en l’Horta.
Recientemente, Aromes de can Rosselló denunció que este año no podrá celebrar la sexta edición de la fiesta de floración de lavanda porque los jabalíes han arrasado la cosecha y Mònica Rosselló, responsable de la finca, dice que no les quedará otra que arrancar las plantas.