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UNIVERSIDAD NORMATIVA

Aprobada la ley que aumenta la financiación de las universidades

Para ser rector no será necesario ser catedrático || Fija un máximo del 8% de contratos temporales y reconoce el derecho de los alumnos a la huelga

Movilización. El mes pasado un grupo de docentes, personal y estudiantes protestaron contra la nueva ley de Universidades.

Movilización. El mes pasado un grupo de docentes, personal y estudiantes protestaron contra la nueva ley de Universidades.GERARD HOYAS

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El Congreso aprobó ayer por mayoría absoluta la ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) que se compromete por primera vez a destinar como mínimo un 1% del PIB a la Universidad de aquí al 2030 (ahora ronda el 0,7%), algo en lo que ya está trabajando el Gobierno central con las comunidades autónomas y los rectores. Tras la votación de las enmiendas del Senado, el pleno de la Cámara Baja respaldó el texto de la tercera reforma universitaria en democracia con 182 votos a favor, 157 en contra y 2 abstenciones. La ley entrará en vigor a los veinte días de su publicación en el BOE.

La LOSU determina que para ser rector no es necesario ser catedrático, pero sí tener tres sexenios de investigación, tres quinquenios docentes y cuatro años de experiencia de gestión universitaria en algún cargo unipersonal. El mandato será de 6 años no renovables. En cuanto a la plantilla, los contratos temporales no podrán superar el 8% (ahora son un 40%) y las alrededor de 25.000 plazas temporales de profesores asociados se convertirán en indefinidas.

Crea la figura de docente sustituto y la de profesor distinguido, que se encargará de captar personas de prestigio académico e investigador, tanto nacional como extranjero. También indica que el estudiantado tendrá por primera vez derecho al paro académico, con lo que no se arriesga a ser penalizado por no asistir a clase o a un examen por ese motivo. Además, garantiza que su participación en los órganos de gobierno será de un mínimo del 25%.

Asimismo, pone un tope a las tasas universitarias, que sólo podrán mantenerse o reducirse. Por otra parte, facilita el acceso a la formación continua a personas sin título universitario, pero que acrediten experiencia laboral o profesional de competencias universitarias. Asimismo, fija que desde el inicio los estudios de doctorado hasta la estabilización solo pasarán diez años.

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