VÍDEO | Empiezan los trabajos de derribo de la antigua comisaría de la calle Sant Martí de Lleida
El ayuntamiento prevé destinar el solar a una zona verde
Este viernes han empezado los trabajos de demolición de la antigua comisaría de la calle Sant Martí de Lleida. La Paeria prevé destinar el solar después de la demolición a una zona verde. El inmueble acogió la oficina del DNI hasta el 2009 y el ministerio del Interior la cerró definitivamente en octubre del 2011. Entre finales del 2015 y principios del 2016 estuvo okupado.
En este solar, propiedad de la Paeria desde el 2020, se habilitará una zona verde con el objetivo de "esponjar" el Centro Histórico, ha explicado el alcalde de la ciudad, Miquel Pueyo, durante la visita que ha hecho este viernes para ver cómo avanzan los trabajos. Las tareas de derribo se alargarán una semana y media y tienen un coste de 62.476 euros. Por su parte, el primer teniente de alcalde, Toni Postius, ha indicado que el solar está calificado como zona verde y que eso explica que no se haya planteado la opción de recuperar ni restaurar una parte del antiguo edificio.
El antiguo cuartel de la calle Sant Martí está en desuso desde el año 2011 y en el 2020 la Paeria la compró después de llegar a un acuerdo con el gobierno español por un importe de 170.000 euros. Miquel Pueyo ha explicado que el derribo "es una buena noticia" porque la ciudad se libera de un edificio "que no tiene ningún interés patrimonial ni práctico" con el objetivo "de esponjar el Centro Histórico y ofrecer servicios y utilidades". Además, ha destacado que el espacio se encuentra justo al lado del terreno donde se tiene que construir el nuevo edificio único de la Generalitat en la ciudad.
Pueyo ha añadido que la futura zona verde todavía no se ha definido y que están escuchando las sugerencias de entidades y colectivos del barrio sobre cómo ordenar este espacio ajardinado, cómo podría ser, por ejemplo, habilitar un pequeño anfiteatro. Por su parte, Toni Postius ha indicado que el espacio "estaba en avanzado estado de degradación" y en los últimos años había tenido "problemas de okupaciones y de plagas". Sobre la opción de restaurar una parte del edificio, ha afirmado que "desde el punto de vista urbanístico es incompatible", ya que está calificado como zona verde.
Asimismo, ha indicado que una vez se haya limpiado el espacio, los arqueólogos harán prospecciones en la zona para ver si en este espacio quedan tramos de muralla de la Lleida medieval.