Más de 720 multas en seis años en Lleida por la polémica 'ley Mordaza'

Las fuerzas y cuerpos de seguridad tramitaron entre 2015 y 2021 un total de 724 sanciones en las comarcas leridanas por infracciones a la polémica Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, la conocida como ‘ley Mordaza’, que ocho años después de su aprobación sigue en vigor tras varios intentos fallidos de reforma. Estas cifras no incluyen las multas impuestas por los Mossos d’Esquadra, que no aportan datos a la estadística del ministerio de Interior. En total, el montante pagado en Lleida ha sido de 285.963 euros.

Según el último balance de Interior, el 2016, el año posterior a su entrada en vigor, fue el que aglutinó más sanciones, con 181 y más de 160.000 euros. En 2021, se impusieron 79 sanciones por esta ley en la provincia de Lleida, una menos que en 2020 y la mitad en comparación con el año prepandmeia, cuando fueron 160. Por tipo de infracción, Interior indica que el 41,2% de las multas impuestas en los seis primeros años de la normativa ha sido por incumplir el artículo 36.12 de la normativa, relativo a la fabricación, reparación, almacenamiento, circulación, comercio, transporte, adquisición o utilización de armas reglamentarias, explosivos o artículos pirotécnicos.

Asimismo, se han tramitado 156 sanciones por incumplir la normativa respecto a la documentación identificativa y otras 95 por la omisión o la insuficiencia de medidas para garantizar la conservación de la documentación de armas y explosivos. También se contabilizaron 53 multas por faltas de respeto y consideración a miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad y otras 27 por desobediencia o resistencia a la autoridad, que ha supuesto el pago de 16.627 euros. Precisamente, las infracciones correspondientes a la desobediencia y las faltas de respeto a los agentes de la autoridad son las que más polémica han generado desde que entró en vigor esta ley.

Por su parte, ERC avanzó ayer que tiene la intención de presentar junto a EH Bildu y Unidas Podemos una proposición de ley en el Congreso para dar “una nueva oportunidad” a la reforma de la ley Mordaza, después de que el martes en la Comisión de Interior decayera por discrepancias en la izquierda una iniciativa debatida durante casi dos años. Fuentes de ERC explicaron que la idea es presentar una nueva propuesta que sea “lo menos difícil de no ser votada” y que incluya los puntos ya consensuados pero también aquellos en los que hasta ahora no ha sido posible el acuerdo entre los partidos de izquierda, como el uso de material antidisturbios o las devoluciones en caliente.