El juzgado mercantil de Lleida perdona una deuda de 267.435 euros a un transportista afectado por la crisis inmobiliaria
El hombre vio cómo iba creciendo sus deudas por los intereses lo que provocó que casi tuviera que vivir en la indigencia
El juzgado de Primera Instancia número 6 (mercantil) de Lleida ha perdonado una deuda de 267.435 euros a un transportista de Lleida al aplicar la Ley de la Segunda Oportunidad. El afectado, V. J. D., regentaba un negocio de transportes en la capital del Segrià, pero tras la crisis del 2008 sufrió en primera persona las consecuencias de la caída del sector inmobiliario, explican desde el despacho Bergadà Asociados, situado en Agramunt, que ha llevado el caso. En este sentido, tal y como comentan, durante años ha ido arrastrando las deudas y éstas han ido creciendo por los intereses moratorios. Además, actualmente trabaja como asalariado, pero sus ingresos han ido disminuyendo por los embargos de las ejecuciones de las deudas.
Tras unos meses de procedimiento, el juez de Lleida le concedía el perdón de sus deudas con la exoneración del pasivo insatisfecho sin un plan de pagos", explica la abogada y socia fundadora del despacho que ha llevado el caso, Marta Bergadà. Por su la víctima explica que "estaba en una situación límite, porque han sido muchos años con la nómina embargada y tengo dos hijas y un domicilio que pagar, entre otros gastos, y sin poder tener nada a mi nombre. Las personas que no han pasado por esto no se pueden hacer a la idea de lo duro que es". "Tanto yo como mi familia ahora vemos el futuro de otra manera, con optimismo, ya que podemos volver a empezar sin tener ninguna deuda".
Una ley todavía desconocida entre las personas endeudadas
La letrada argumenta que "es un caso que no nos es extraño. Cada día contactan con nuestro despacho personas de toda España y nos cuentan que se encuentran en un estado de insolvencia, pero que desconocían hasta el momento la Ley de la Segunda Oportunidad. Por ello, al principio se muestran un poco escépticos, ya que vienen de un camino muy duro".
Así mismo, añade que "sólo las personas que han pasado por ese trance pueden comprender realmente lo que significa y cómo es sentirse que les hayan excluido de la sociedad". Y es que, Bergadà indica que "muchos prefieren intentar olvidar". Sin embargo, "las deudas no desaparecen y cada vez están más enmarañados".
Con la Reforma de la Ley de la Segunda Oportunidad, que entró en vigor el 26 de septiembre del año pasado, "el procedimiento de la exoneración de las deudas es mucho más ágil, pero han aumentado los requisitos de acceso", explica la letrada. Así, "en el caso de que el deudor cuente con derivaciones de por parte de la TGSS o de Hacienda se blinda el acceso, a no ser que haya liquidado esa deuda por completo". En esta línea, la abogada y socia fundadora de Bergadà Asociados explica que la Ley Concursal "es la ley que, posiblemente, más reformas hay sufrido desde sus inicios. Son más de 30 las modificaciones operadas". Por ello concluye que "no es sencillo para un despacho generalista poderse especializar, puesto que la especialidad de concursal requiere del abogado una formación constante y un estudio diario de jurisprudencia".