La asociación de Lleida gestionará las Firetes al renunciar la firma de Getafe

Giro de última hora en la gestión de las Firetes de Lleida en el recinto de la antigua Hípica. La Empresa Municipal de Agenda Urbana (EMAU) la adjudicó ayer a la empresa de Getafe, European Fairs Attractions SL, que había presentado una mejor oferta que la de los feriantes de Lleida. No obstante, poco después de hacerse pública la adjudicación, la firma madrileña comunicó a la EMAU su renuncia, para no interferir en el buen ambiente de las fiestas y no perjudicar a nadie, tras el revuelo provocado por la situación. Y es que la asociación de feriantes de Lleida, tras conocer que la oferta económica de European Fairs Attractions SL, superaba a la suya, manifestó su descontento y convocó una concentración en la que cerca de sus sesenta integrantes acordaron que no participarían en les Firetes si la empresa de Getafe ganaba el concurso y aseguraban que supondría un encarecimiento de los precios, por lo que “saldrá perdiendo toda la ciudad”.

Ahora, una vez formalizada su renuncia, la EMAU iniciará el proceso para la adjudicación a la segunda mejor oferta, la de los feriantes de Lleida. El concurso público para gestionar las Firetes fue convocado el 13 de marzo y tiene una vigencia de tres años con la posibilidad de prorrogarlo otros tres más y con un importe mínimo de 65.000 euros al año. La oferta que presentó la asociación de feriantes de Lleida apenas superó el presupuesto base (65.501 euros) y estaba muy por debajo de la de European Fairs Attraction SL, que era de 97.500 euros.

Como era de prever, la EMAU le adjudicó el concurso, pero sorpresivamente acto seguido optó por renunciar al contrato. Según ha podido saber este diario, la empresa de Getafe ha tomado esta decisión tras la polémica surgida a raíz de que trascendiera que la suya era la mayor oferta, lo que hizo que los feriantes locales acordaran boicotear las Firetes si no podían gestionarlas. Además, aseguraron que si finalmente la empresa madrileña ganaba el concurso esto comportaría un aumento general de los precios que perjudicaría tanto a los feriantes que vendrían como a los propios ciudadanos.

“Saldríamos perdiendo toda la ciudad”, aseguraron en su momento desde la asociación local. En este sentido, en su renuncia, la empresa madrileña afirma que no quiere generar perjuicios a nadie y tampoco quiere que haya mal ambiente en las fiestas mayores. Por su parte, el presidente de los feriantes leridanos, Hugo García, alabó el comportamiento de la firma de Getafe.

“Se han portado como unos señores y han actuado de forma responsable porque no querían generar problemas ni a nuestro colectivo ni al conjunto de la ciudadanía”. García comunicó la renuncia de su competidora a sus asociados ayer mismo “para empezar con la organización y logística de las Firetes”. No obstante, reconoció que “algunos compañeros de la asociación ya se habían buscado otras fiestas, de modo que deberemos avisarlos y saber realmente cuantos seremos, pero la ciudad tendrá Firetes estas fiestas mayores”.Las atracciones podrán estar en el recinto de la Hípica del 24 de abril al 5 de junio y del 11 de septiembre al 16 de octubre.

La entidad local lleva desde 1991 organizando las atracciones

La disputa que este año ha habido por la gestión de las Firetes constituye una excepción en relación a lo que ha sucedido en las últimas décadas, ya que la asociación de feriantes locales lleva desde 1991 gestionando las atracciones en Lleida ciudad de forma ininterrumpida y apenas sin competencia. El último precedente en el que otra empresa optó a su gestión ocurrió en 2019 y, curiosamente, la firma que se presentó fue también European Fairs Attraction SL, la misma que ayer ganó y renunció a la concesión. Entonces esta empresa presentó una oferta de 160.000 euros anuales por un período de 7 años.

Sin embargo, la firma perdió el concurso contra los feriantes leridanos, que presentaron una oferta superior de 181.000 euros, que doblaba el precio de salida de 90.000 euros. No obstante, después de ganar el concurso público los feriantes locales pidieron al ayuntamiento renegociar la concesión porque no podían asumir la cantidad por la cual habían pujado.