Los vecinos “suspenden” la limpieza viaria de Lleida, según un estudio de la OCU

Un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sitúa Lleida entre las ciudades del Estado con peor servicio de limpieza viaria. Concretamente es la undécima capital de provincia o gran ciudad con una menor satisfacción por parte de sus ciudadanos con una nota de 42 puntos sobre 100, un descenso de 9 puntos respecto al anterior estudio de 2019, empatando con ciudades como Tarragona o Cartagena. Esto sitúa Lleida como la segunda capital catalana con peor servicio de limpieza después de Barcelona y el estudio también destaca que es la décima ciudad donde más ha bajado la satisfacción en los últimos 28 años, con un descenso de 10 puntos.

El informe, que ha analizado la limpieza de 69 capitales de provincia y grandes ciudades, constata que las principales quejas de los ciudadanos son la excesiva presencia de excrementos de perros en la vía pública, la suciedad alrededor de los contenedores y la falta de limpieza en el centro y las afueras. Precisamente, estos tres factores también han generado numerosas quejas en Lleida. A nivel global, las ciudades peor valoradas son Palma (35), Alicante (37) y Sevilla (38), y las mejores son Oviedo (83), Bilbao (77) y Vigo (76).

Fuentes municipales precisaron que “es una encuesta de satisfacción, no de funcionamiento del servicio” y atribuyeron este resultado a “tres nuevos factores que seguro han incidido en el empeoramiento de la sensación de limpieza”. Por un lado, que la pandemia de coronavirus provocó una afectación importante en la prestación del servicio debido a las restricciones y a los confinamientos. Por otro, remarcaron que las conductas incívicas “afectan negativamente al estado de la limpieza, especialmente después de la pandemia”.

Por último, señalaron que la “obsolescencia” del contrato de limpieza hace “agravar año tras año la prestación del servicio”, motivo por el cual el ayuntamiento no prorrogará la actual concesión y licitará una nueva para que esté en marcha a mediados del año que viene. No obstante, remarcaron que hasta entonces “se deberá complementar el contrato de limpieza con otros, como ya se ha hecho con la puesta en marcha de la brigada municipal de refuerzo”, que desde febrero patrulla la ciudad en busca de vertidos. Un refuerzo que, aseguran las mismas fuentes, no se ha hecho hasta este año debido a los problemas financieros que arrastra el ayuntamiento.