Condenado a 24 años de prisión por intentar asesinar a un camionero

La Audiencia de Lleida ha condenado a veinticuatro años y dos meses de cárcel a David Giménez Romero, un ladrón multirreincidente que intentó asesinar a un camionero en Vilanova de la Barca en enero de 2020. Concretamente, el tribunal le condena a doce años de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa; otros diez años y seis meses por robos; un año por tenencia ilícita de armas; y ocho meses de prisión por amenazas. También le prohíbe acercase o comunicarse durante 23 años con la víctima, a la que deberá pagar una indemnización de más de 208.000 euros.

Su periplo delictivo comenzó el 15 de enero de 2020 en Barcelona, donde robó una furgoneta que encontró con las llaves puestas. Diez días después, se dirigió con este vehículo a una gasolinera de Sant Cugat, donde repostó sin pagar, lo mismo que hizo en otra de Molins de Rei. De ahí, se fue hasta Vilanova de la Barca, donde entre el 26 de enero y el 27 de enero, intentó robar en dos empresas situadas en la C13 y robó un móvil en un vehículo.

También intentó robar en una furgoneta. A continuación, se dirigió a otra nave, en la que robó herramientas. Después, se dirigió a otra empresa e intentó entrar empotrando la furgoneta contra la puerta principal.

No lo consiguió y probó con el mismo método en otra, de la que se llevó varios objetos. El acusado se dirigió a otra empresa y, aunque rompió puertas y ventanas de un vehículo, no se llevó nada. En la misma zona, también intentó robar en un camión, pero sin éxito.

En ese momento, en la plaza del Portal, se tapó la cara y la cabeza con un pañuelo y una capucha y entró en un camión. El conductor lo sorprendió y se enfrentó a él. Fue entonces cuando el acusado sacó un revólver, disparó al camionero y huyó.

En Alcoletge, sustrajo otro vehículo. El acusado se dirigió hasta Lleida, donde atracó una gasolinera en La Bordeta, amenazando al empleado con el arma. Finalmente, fue detenido cuando se paró en una gasolinera de Les Borges Blanques.

La víctima, que pasó 15 días en la UCI, relató ante el tribunal que “me disparó a bocajarro y, cuando intentaba huir, me remató por la espalda”. En cuanto a la posibilidad de que el acusado actuara enajenado y bajo los efectos de las drogas, el fiscal aseguró que “los Mossos que le arrestaron afirmaron que su estado era normal”. Asimismo, recordó que el hombre ha sido condenado una decena de veces en las últimas dos décadas.

Además de la pena de prisión, la Audiencia de Lleida también le condena al pago de dos multas de 540 euros por sendos delitos de hurto y estafa.