Adesma cierra la compra del convento de los franciscanos de Vila Antònia, salvo la iglesia

Adesma Fundació Privada ha cerrado la compra de las dependencias de la calle Vila Antònia que hasta agosto del año pasado fueron la sede de la orden de los frailes franciscanos (conocidos como los ‘frarets’) y la destinarán a ampliar servicios de la residencia que gestionan, denominada Sant Antoni de Pàdua y ubicada justo al lado. La adquisición no incluye la iglesia, que fueda fuera de la operación, según confirmó el presidente de la fundación Adesma, Xavier Castán. Explicó que tienen previsto efectuar reformas en el espacio que han comprado para ampliar zonas comunes de la residencia, como el centro de día, la sala de terapias y las salas de estar, con el objetivo de mejorar la comodidad y calidad de vida de los usuarios.

En cambio, subrayó que no prevén habilitar más plazas en el equipamiento. Detalló que actualmente dispone de 98, pero que en total gestionan hasta 147 contando las de otros espacios residenciales de Lleida. En cuanto al calendario, detalló que en estos momentos están renovando algunas instalaciones del edificio de la residencia, como los ascensores y las calderas, y reformando la segunda planta.

Añadió que cuando terminen estos trabajos, hacia finales de este año o a principios del próximo, abordarán las obras del espacio que han adquirido a los franciscanos.La decisión de cerrar el convento y el santuario de los ‘frarets’ fue tomada en abril de 2022 en el Capítulo Provincial (reunión que se lleva a cabo cada tres años para tomar medidas) y entonces se acordó también el tralado de los cuatro frailes que quedaban a Barcelona (dos de ellos) y a Albacete (los otros dos). La decisión fue motivado por la falta de vocaciones y el 28 de agosto el santuario de Sant Antoni de Pàdua celebró la última misa, a la que asistieron más de un centenar de feligreses, que se despidieron de los cuatro frailes que seguían entonces en la ciudad. Las instalaciones quedaron cerradas y Adesma Fundación Privada ha negociado durante este tiempo la adquisición de las instaladaciones de la orden.Los franciscanos se instalaron en Lleida en el año 1217, de modo que la orden ha estado en la ciudad durante ocho siglos.El primer convento e iglesia se construyó en la actual plaza Ricard Viñes.