CRIMEN INVESTIGACIÓN
Detenida en Lleida por el asesinato de su hija de 12 años en Rumanía en abril
Compatriotas alertaron a los Mossos de que la supuesta parricida estaba en Ponent
Los Mossos d'Esquadra localizaron el lunes por la noche en Alpicat a una mujer, originaria de Rumanía, que podría estar relacionada con el asesinato de su hija de 12 años en ese país. Fue trasladada a comisaría y, ante los indicios, fue detenida. La policía también busca a su actual pareja, que podría estar detrás del asesinato de la menor.
Los Mossos d’Esquadra detuvieron la una de la madrugada de ayer en la comisaría de Lleida a una mujer por su presunta participación en el asesinato de su hija de 12 años en Rumanía. La supuesta parricida, S.M.I., fue localizada horas antes en un domicilio situado en una partida de Alpicat después de que compatriotas de la mujer alertaran a la policía catalana de que la supuesta parricida estaba residiendo en Ponent, según ha podido saber este periódico. La investigación policial sigue abierta para conocer su grado de participación y para localizar a su actual pareja, del que sospecha que habría participado en el asesinato, cometido en abril pero que no se descubrió hasta la semana pasada.
El padre de la niña –sus padres están separados y él tenía la custodia– denunció la desaparición después de que la menor pasara las vacaciones de Semana Santa con su madre y el compañero de ésta en un domicilio de un barrio de Bucarest y no regresara a casa, según informaron medios locales que llevan semanas haciéndose eco del caso. Sospechaban que podría tratarse de un secuestro por parte de la mujer. Sin embargo, el propietario del piso, que reside en España, tuvo que ir la semana pasada a Rumanía debido a que la mujer a la que que alquilaba la casa no le contestaba al teléfono.
Al revisar la vivienda halló un cadáver oculto en el canapé de un sofá. El cuerpo presentaba un avanzado estado de descomposición, estaba envuelto en una bolsa y atado con una cuerda. La estatura, el pelo largo, las joyas y el número del zapato apuntaban a que se trataba de la niña desaparecida aunque todavía se debía confirmar su identidad por lo que se practicaron análisis de ADN, según estos medios.
Los investigadores también determinaron que se trataba de una muerte violenta y, en consecuencia, tanto la Policía como los familiares de la niña, sospechaban que la pareja, que ya no se encontraba en Rumanía, estaría detrás del crimen.
El padre de la niña denunció la desaparición de la niña el pasado abril tras estar con su madre
Los análisis genéticos llevados a cabo por el Instituto Nacional de Criminalística, que los que compararon el perfil genético del hombre que denunció la desaparición, confirmaron que la víctima era la niña desaparecida. Al parecer, los inquilinos habían limpiado el apartamento y los investigadores no hallaron restos de sangre pero sí unas pulseras que serían de la menor. También comprobaron que la pareja había abandonado el país en coche.
La División de Investigación Criminal (DIC) ha abierto las diligencias correspondientes para esclarecer los hechos, el grado de participación de la detenida y activará los mecanismos de coordinación interpolicial para colaborar con las autoridades policiales competentes. En Rumanía, la investigación la lleva a cabo la Fiscalía adscrita al Tribunal de Bucarest y la Dirección General de Policía del Municipio de Bucarest-Servicio de Homicidios. El caso se investiga como un delito de asesinato.
El alcalde de Alpicat, Joan Gilart, afirmó que “la noticia ha causado sorpresa entre los vecinos y desconocemos por completo qué ha ocurrido”.