BARRIOS VECINOS
Nuevas quejas vecinales por el ruido que genera una discoteca en el barrio de Cappont de Lleida
Vecinos de las calles Pere de Cabrera y Guillem de Beziers, en Cappont, criticaron ayer el ruido que generó una fiesta privada en la Sala Manolita durante la madrugada del domingo al lunes. Unas molestias que denunciaron ante la Guardia Urbana, que se personó con cuatro dotaciones. Según detalló un vecino de la zona, se empezaron a notar “pasadas las dos de la madrugada, cuando vecinos vieron que la discoteca tenía las luces apagadas pero con gente en la puerta y la música a todo volumen”.
Un hecho, el elevado ruido, que aseguran “es bastante recurrente”, así como las peleas y las micciones en la vía pública. Por todo ello, se plantean adoptar medidas legales para reclamar el cierre o traslado de la discoteca. Un representante de la discoteca confirmó que era una fiesta privada, que tenían licencia hasta las cinco de la mañana para abrir y que la Guardia Urbana se personó allí “para ver que todo estaba en orden y se fueron”.
Fuentes del cuerpo confirmaron que acudieron pero que levantaron acta al no observar ninguna irregularidad. A su vez, la presidenta vecinal, Veni Ros, criticó que los responsables de la discoteca permitiera la fiesta a estas horas “cuando son conocedores de los problemas de convivencia que generan en la zona”.