TRIBUNALES SENTENCIA
Absuelto el psiquiatra acusado de quedarse patrimonio de un paciente
La Audiencia de Lleida considera que no hay pruebas suficientes || La Fiscalía pedía 6 años por estafa y apropiación indebida y la acusación particular, 8
La Audiencia de Lleida ha absuelto a un psiquiatra leridano, J.R.P.P, acusado de quedarse patrimonio de un paciente y para el que la Fiscalía solicitaba una condena de seis años de prisión por estafa y apropiación indebida. La acusación particular pidió 8 años de cárcel. El tribunal considera en su sentencia que no han quedado acreditados los “elementos esenciales” de la estafa consistentes en el engaño, por lo que dicta la absolución.
Asimismo, sobre el delito de apropiación indebida del que también estaba acusado, considera que debe declararse prescrito, tal y como solicitó la defensa, ejercida por Enric Rubio de Rubio Advocats. El escrito de acusación de la Fiscalía señalaba que el acusado se había quedado con patrimonio de un paciente de su clínica y el hermano de este, que fallecieron en 2006 y 2004, respectivamente. El acusado negó durante la celebración del juicio, celebrado el pasado 9 de marzo, haberse quedado patrimonio y declaró que “fue el hermano de mi paciente y el abogado de la familia quien me lo pidió”.
El Ministerio Público, que solicitó una condena de seis años de prisión, consideró que el acusado, “aprovechándose de la confianza depositada en él por la familia”, se hizo con la tutela de su paciente, ingresado en su clínica desde el año 1981, y con el letrado de la familia firmaron un contrato vitalicio que incluía, entre otros, la cesión de una casa de su propiedad, valorada en 240.000 euros, para sufragar los gastos de su estancia en la clínica. Acusaciones que el psiquiatra negó en el juicio. Por su parte, un agente de la Guardia Civil explicó que sospecharon de una posible estafa al hallar tres facturas con la misma numeración, fecha y paciente con distintos importes y que cobraba al paciente muchos conceptos extras.
Sin embargo, en la sentencia la Audiencia considera que no hay pruebas suficientes para concluir que incluyera conceptos falsos en las facturas y que hay dudas que deben “operar siempre a favor del reo”, por lo que también se le absuelve del delito de falsedad en documento mercantil. Ya en el inicio del juicio, la defensa planteó varias cuestiones previas como la nulidad de las actuaciones y la prescripción de los delitos.