TRIBUNALES LITIGIO
Indemnizan con 500.000 € a una leridana que quedó parapléjica tras un parto en el Arnau de Vilanova de Lleida
El ICS abona esta cantidad a la afectada y evita así llegar a juicio || Ocurrió en noviembre de 2019 y la mujer no recuperó la sensibilidad en las piernas después de que le aplicaran la anestesia epidural
El Institut Català de la Salut (ICS) de la Generalitat ha indemnizado con 500.000 euros a una vecina de Lleida que en noviembre de 2019 se quedó parapléjica tras en un parto en el hospital Arnau de Vilanova. La mujer no recuperó la sensibilidad en las piernas después de que le aplicaran la anestesia epidural. Tenía un hematoma en la columna y tardaron 14 horas en operarla, lo que supuso una negligencia médica.
Ha sido un acuerdo transaccional entre el ICS y la defensa de la afectada, representada por Enric Rubio, de Rubio Advocats, después de que estos últimos interpusieran en 2021 un recurso ante el juzgado de lo Contencioso Administrativo de Lleida “por el silencio administrativo que hemos recibido como respuesta a la reclamación ante el departamento de Salud”. De esta forma, el ICS reconoce la negligencia y evita el litigio. En este sentido, Enric Rubio asegura que “con la indemnización que han abonado ha quedado acreditado que hubo una negligencia médica por la demora en la operación en lo que se denomina una pérdida de oportunidad”.
La mujer sufrió un hematoma que no se produjo por la punción sino por una protusión ósea que tenía en el conducto raquídeo. Así, se reconoce que si hubiera sido intervenida antes se hubiera podido drenar el hematoma y mirar de evitar o reducir el daño. Ocurrió el 14 de noviembre de 2019, cuando Carmen Mejía y Rubén Carmona fueron padres de Valentina.
Fue un día de máxima felicidad por el nacimiento de su hija pero también el inicio de una pesadilla que acabaría con la mujer postrada de por vida en una silla de ruedas al quedar parapléjica, como avanzó este periódico. Fue un parto por cesárea. Meses después, la afectada explicó a este periódico cómo lo vivió: “sentí un dolor terrible.
Se me durmió casi todo el cuerpo”. En el quirófano, al sentir una fuerte quemazón dorsal, solicitó a una enfermera que cogiera a la niña y que le aplicaran algo frío en la espalda porque le quemaba. Una vez en reanimación, la mujer comentó a las enfermeras que no sentía las piernas pero le dijeron que era normal por la anestesia.
No fue hasta pasadas las diez de la mañana, 14 horas después del parto, cuando la mujer fue sometida a una resonancia para, posteriormente, operarla de urgencia.
Evacuada al Vall d’Hebron y dos meses en el Institut Guttmann
El 18 de noviembre, cuatro días después del parto, fue trasladada en helicóptero al hospital Vall d’Hebron de Barcelona. “Allí fue la primera vez que me dijeron que jamás volvería caminar”, lamentó.
Posteriormente, estuvo ingresada en el Institut Guttmann, especializado en lesiones medulares, entre el 20 de enero y el 26 de marzo de 2020. “Allí había un chico que sufrió un accidente de tráfico y tenía la misma lesión que yo. A él lo intervinieron a las cinco horas y puede andar ayudado con una muleta”, explicó la leridana.
Enric Rubio reitera que “desde que se produjo la cesárea con aplicación de anestesia epidural hasta que se adoptó alguna medida para verificar el motivo de la falta de sensibilidad transcurrieron más de 14 horas, esto es, un tiempo muy prolongado para evitar que la lesión medular fuese definitiva”. La afectada y su letrado también lamentaron la falta de información que hubo por parte del hospital leridano. Ante la posible negligencia, presentaron primero una reclamación ante el ICS y, al no ser atendida, derivó en una demanda judicial.