Empiezan los trabajos previos para la rehabilitación del Palau de Vidre

Un grupo de operarios empezó ayer a trasladar el material de oficinas que la Fira de Lleida tiene en el Palau de Vidre al pabellón 4. Una actuación que forma parte de los trabajos previos a la rehabilitación de este edificio, que empezarán en las próximas semanas y se alargarán hasta finales del 2024. El lunes otro grupo de operarios también estaba tomando mediciones de las dimensiones y el firme del edificio y marcaron varios de sus pilares “como zonas de actuación especial”, señalaron los mismos operarios.

Antes de estos trabajos previos, la comunidad musulmana que utilizaba el Palau de Vidre como mezquita desde el 2012 se trasladó al pabellón 4 el pasado 16 de junio, donde estarán hasta principios de septiembre y a partir de allí deberán buscar un nuevo espacio donde rezar. El traslado del material de oficina de la Fira marca el inicio simbólico de la reforma de este histórico edificio después de meses de trámites y problemas administrativos. El anterior equipo de gobierno presentó la reforma del Palau de Vidre para que recibiera fondos europeos Next Generation, una propuesta que fue aceptada y por la que recibieron tres millones de euros.

A principios de año el gobierno sacó a concurso las obras, que las adjudicó el 12 de marzo a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Romero Polo y Acsa, pero nueve días después, el despacho de arquitectos Fabric Office, que formaba parte de la oferta perdedora del concurso público, presentó un recurso al el Tribunal de Contratos que obligó a suspender la tramitación de la adjudicación. En el recurso se pedía a revocar la adjudicación por supuestas irregularidades en su tramitación y por haber hecho una puntuación arbitraria de las ofertas. Finalmente, el tribunal rechazó el recurso y rebatió todos los argumentos que pedían paralizar su tramitación. No obstante, el hecho de presentar este recurso obligó a demorar los trabajos previos a la reforma durante varias semanas, ya que inicialmente las obras iban a empezar en abril. Con esta reforma, el Palau de Vidre, que data de 1965, se destinará a acoger oficinas de la Fira y a usos deportivos y sociales y tendrá también una sala de actos y un hotel de entidades.