El ayuntamiento de Lleida declara en ruina un edificio de los bloques Grup Mariola

El ayuntamiento ha ordenado el desalojo preventivo y declarado en estado de ruina uno de los bloques del Grup Mariola, conocidos antiguamente como Ramiro Ledesma, debido a que su estado representa “un peligro para la salud pública” y tras comprobar que ninguna de las viviendas reunía las condiciones mínimas de habitabilidad. El inmueble en cuestión es la escalera 6 del bloque F, un edificio que el ayuntamiento tiene en su punto de mira desde 2019, cuando ordenó tapiar todos sus accesos para evitar que fuera okupado o se deteriorara aún más. La situación siguió así hasta el pasado febrero, cuando la Guardia Urbana inspeccionó el inmueble para comprobar la afectación de una fuga de agua.

Durante su visita, pudieron comprobar que en las viviendas había claros signos de que habían sido okupadas recientemente y que “están completamente desballestadas, sin red eléctrica ni alcantarillado y plagas de todo tipo, como ratas y chinches”. Su informe detallaba que en algunas había tanta basura “que llegaba hasta el techo y en estado de putrefacción” y corroboró que la situación de insalubridad del inmueble “es generalizada y nociva para el vecindario”. A raíz del informe policial y, tras comprobar que el coste que supondría reparar el edificio supera el 50% de su valor, el consistorio decretó el pasado 17 de julio su ruina económica y ordenó a todos sus propietarios, desde fondos de inversión y entidades bancarias hasta particulares, que cierren todos los accesos y desalojen las viviendas para poder proceder a la demolición o reforma del bloque.

A su vez, el consistorio advirtió a los propietarios que si no vacían el inmueble por su cuenta lo podrá hacer el ayuntamiento de forma subsidiaria.Este será el segundo derribo de uno de los bloques Ramiro Ledesma, un complejo de pisos sociales construidos en los años cincuenta y sesenta para familias de trabajadores llegados de varios puntos del Estado. La primera demolición tuvo lugar en abril de 2019 y el inmueble afectado fue la escalera 2 del bloque E, después de constatar múltiples deficiencias y no reunir las condiciones de habitabilidad, por lo que también fue declarado en ruina económica.

Un pequeño barrio con más de 500 pisos sociales muy deteriorados

El estado de los bloques del Grup Mariola ha sido una cuestión que los últimos gobiernos municipales han tratado de solucionar con diferentes proyectos, pero ninguno ha prosperado hasta ahora. El primero surgió en noviembre de 2017, cuando entonces el gobierno socialista de Ángel Ros presentó el proyecto Mariola 20.000, un plan de regeneración para derribar todos estos bloques y construir nuevos pisos. Una operación urbanística que afectaría a 20.000 metros cuadrados, de ahí su nombre, a 508 viviendas y que se iba a llevar a cabo en un plazo de unos diez años. No obstante, la llegada al gobierno municipal de ERC, Junts y el Comú en el 2019 hizo que el plan quedara aparcado.

No fue hasta agosto de 2021 cuando el gobierno anunció que había encargado un informe para analizar si era viable rehabilitar los bloques sociales del Grup Mariola y otros tres de la calle Cardenal Cisneros en lugar de derribarlos. En 2022 recibió fondos europeos para rehabilitar energéticamente las viviendas, entre las que se incluía el Grup Mariola. Ahora, la voluntad del nuevo gobierno del PSC es retomar el proyecto Mariola 20.000.