SEGRE

El juzgado perdona a una deuda de más de 200.000 euros a un padre y a su hija de Tornabous que avalaron una sociedad frutícola

Vista de la sede de los juzgados de Lleida en el edificio del Canyeret.

Vista de la sede de los juzgados de Lleida en el edificio del Canyeret.SEGRE

Publicado por

Creado:

Actualizado:

El Juzgado de Primera Instancia número 6 de Lleida ha perdonado una deuda de 203.283 euros a dos vecinos de Tornabous, padre e hija, que avalaron una sociedad frutícola la cual sufrió el impago de más de un millón de euros de la principal empresa comercializadora que tenía al quebrar. De este modo, según ha explicado la defensa de los afectados, el juez aplica la Ley de la Segunda Oportunidad y exonera de un pasivo insatisfecho de 31.834 euros al hombre, de 81 anys, y de 171.449 euros a la hija de 51 años.

La sociedad frutícola se dedicaba a la compra de fruta a los agricultores para su posterior comercialización en los mercados. Durante años el negocio daba las rentabilidades esperadas, incluso más y, por ello, se invirtió en ampliar las naves y las oficinas, para poder aumentar la producción. "Incluso, se solicitó más financiación para plantar y explotar una finca frutícola de la propiedad de la sociedad a fin de no depender únicamente de la producción de otros agricultores externos", explica la abogada y socia fundadora de Bergadà Asociados, Marta Bergadà, quien ha llevado el caso. En este sentido, la familia recuerda que "todo iba bien, por lo que se empezaron a solicitar créditos y estos se fueron avalando, generándose una cifra que fue impresionante".

Todo empezó a tambalearse en el año 2009 cuando la principal empresa comercializadora que trabajaba con la sociedad quebró, dejando impagados más de un millón de euros. Así, la citada sociedad no pudo hacer frente a sus obligaciones contraídas. Cabe decir que los créditos de ésta estaban avalados por los distintos socios, entre ellos los clientes de Bergadà Asociados. Consecuentemente, la sociedad que padre e hija avalaron quedó totalmente afectada y no se pudieron atender a las obligaciones contraídas. "Al estar avalada personalmente los dos, entre otros, se convirtieron en titulares de una deuda que se les hizo imposible de afrontar ", explica Bergadà.

"Durante años hemos recibido numerosas llamadas de los bancos. Nos amenazaban en caso de no hacer frente a la deuda, pero es que no podíamos ni queriendo", puesto que ambos perciben unos ingresos mínimos. Asimismo, los familiares exponen que "durante años en el ámbito familiar no hemos hablado mucho de este tema, ya que nos afectó muchísimo".

EN febrero se inició el procedimiento de la Ley de Segunda Oportunidad "y todo fue muy rápido, ya que a mediados del mes de julio el juez emitía el auto en el cual señalaba que se nos exoneraba del pasivo insatisfecho", manifiestan. "Cuando recibimos la noticia del perdón de la deuda fue una gran liberación y alegría, ya que ahora podemos dormir tranquilos y sin preocupaciones", añaden los afectados.

tracking