ESNOTICIA
El AVE cumple 20 años en Lleida, donde ha transportado 16 millones de viajeros
Instituciones y expertos avalan su impacto, pero sin llegar a las expectativas iniciales
El miércoles se cumplirán 20 años del estreno del AVE Madrid-Lleida, que en 2008 se prolongó hasta Barcelona. Durante estas dos décadas los trenes de alta velocidad de Renfe han transportado a 16 millones de personas en la capital del Segrià. Instituciones y expertos coinciden en que ha dado un mayor dinamismo económico a la ciudad.
“Cuando el AVE llegó a Lleida desde Madrid participé en un estudio en el que colaboraban Paeria, Diputación y Cámara y había un ambiente quizás excesivamente optimista sobre sus efectos; después la realidad ha demostrado que tiene efectos positivos al mejorar las condiciones del transporte, pero no tan espectaculares”. Lo dice el catedrático de Geografía de la UdL y experto en trenes de alta velocidad, Jordi Martí Henneberg, y resulta útil para ilustrar el balance de los primeros 20 años de la línea del AVE, que comenzaron el 11 de octubre de 2003. Madrid pasó a estar a dos horas y 40 minutos de Lleida y, desde 2007, a dos horas y 9 minutos.
Y en febrero de 2008 se estrenó el AVE a Barcelona, que cubre el viaje en una hora. Esta gran mejora se ha traducido en que un total de 16 millones de viajeros han usado a lo largo de estas dos décadas los servicios AVE de Renfe en Lleida, según la compañía, lo que supone una media de 800.000 al año. Renfe sigue siendo la única operadora cuyos trenes de alta velocidad paran en la ciudad, ya que los de las dos privadas que prestan servicio en el corredor pasan de largo por el by-pass de Rufea. Martí señala que el AVE ha supuesto beneficios a nivel empresarial y laboral, en este caso básicamente entre la capital del Segrià y la catalana, al facilitar que personas que residen aquí trabajen en Barcelona y a la inversa. Eso sí, expectativas iniciales que apuntaban a que cientos de barceloneses vendrían a vivir a Lleida, que el entorno de la estación sería un centro de negocios o que habría vuelos en helicóptero entre Lleida y Baqueira, por poner tres ejemplos, no se han llevado a la práctica. El alcalde de la ciudad, Fèlix Larrosa, lo admite, pero subraya que el AVE “ha supuesto un antes y un después y ha puesto a Lleida en el mapa”. “Las cifras de usuarios son impactantes, ha permitido iniciativas de carácter económico y empresarial y otras de carácter laboral”, indica.
Añade que ha beneficiado al sector turístico y que “las oportunidades que ha abierto han sido muchas”. “Ha contribuido a mejorar la economía del territorio, el AVE nos ha posicionado y potenciado”, dice por su parte Jaume Saltó, presidente de la Cámara de Comercio de Lleida. Mientras, Oriol Oró, director de la Fira, subraya que “permite a los participantes o visitantes procedentes de otras ciudades que tienen AVE venir y marcharse en el mismo día, ha sido un éxito”. La vicepresidenta del Colegio de Economistas de Lleida, Marialba Zaragoza, coincide en que ha comportado un impulso, pero avisa de que en los últimos años, desde el inicio de la pandemia, “ha perdido dinamismo y quizás se ha quedado un poco estancado”.
Mejores tarifas y más conexiones, dos de los retos
Dos retos pendientes de la alta velocidad en Lleida son la mejora de las frecuencias y las conexiones y de las tarifas. Larrosa dice que “hemos de asegurarnos que el actual operador (Renfe) tenga vocación comercial, pero también social” y que el AVE “no debe ser solo para personas acomodadas”. Sobre la conexión con Francia, afirma que espera que Renfe adapte frecuencias semanales del Madrid-Marsella para que paren. Y precisa que “el AVE Barcelona-Lyon está combinado con el Lleida- Barcelona, solo hay que hacer un cambio de andenes”, aunque admite que hay que evitar que usar dos trenes encarezca el precio. Mientras, Saltó reclama recuperar todas las frecuencias de antes de la pandemia y subraya la paradoja de que el AVE de las 7 de la mañana hacia Madrid tiene tanta demanda “que si no compras el billete con mucha antelación es imposible tenerlo, y yo mismo he ido en coche a Zaragoza para coger allí un AVE a Madrid”. Y por último es tajante al afirmar que “el precio por kilómetro es altísimo y se debería replantear”. Por su parte, Zaragoza apuesta por buscar sinergias con el aeropuerto de Alguaire.