TRIBUNALES JUICIO
Una joven ratifica que su compañero de piso abusó de ella
La Audiencia de Lleida juzgó ayer a un hombre de 57 años acusado de hacer tocamientos a una compañera de piso, unos 30 años menor que él, en octubre de 2020. La Fiscalía y la acusación particular solicitaron una condena de tres años de prisión para el acusado, que negó los hechos.
La denunciante afirmó ante el tribunal que el acusado quería hacer una cena romántica, pero ella se negó y se fue a su habitación. “Entró de golpe, me tiró encima de la cama, se puso de horcajadas encima y empezó a hacerme tocamientos en los pechos y los genitales”, afirmó la joven, que declaró protegida por una mampara. En cambio, el acusado negó que abusara de su compañera y aseguró que entró a la habitación porque la mujer le quería mostrar unas fotos que tenía en su ordenador. Otro compañero de piso, que ese día no se encontraba en la vivienda, dijo que la chica “estaba en estado de shock y tenía miedo”. Uno de los indicios que hay contra el acusado son unos mensajes de móvil que envió a la joven días antes de los supuestos abusos. Para el procesado, eran “para cuidarla y que se sintiera bien”. En cambio, para el Ministerio Público y la acusación particular, “refuerzan cual era el ánimo del acusado”. Le acusan de los delitos de abuso sexual y delito leve de lesiones y piden una condena de tres años de prisión, tres años de libertad vigilada, una orden de alejamiento de la víctima de cinco años, una indemnización de 2.090 euros y una multa de 600 euros. La defensa pidió la absolución por falta de pruebas. El juicio se celebró finalmente ayer tras haberse suspendido en otras tres ocasiones.