RELIGIÓN EQUIPAMIENTOS
La Paeria licitará una finca en Camí dels Frares para una mezquita u otro centro de culto
Concesión para 50 años con un canon anual mínimo de 61.156,35 euros
El solar tiene una superficie de 8.429 metros cuadrados, es apto para usos religiosos y la propuesta debe ser aprobada por el pleno
La Paeria hizo público anoche que licitará la concesión de una finca municipal de 8.429 m² en el polígono industrial de Camí dels Frares para la construcción de un centro de culto, donde la comunidad musulmana Ibn Hazm prevé poder ubicar su nueva mezquita. La comisión de Urbanismo de la semana próxima debatirá aprobación del pliego de condiciones para la concesión de uso privativo de esta parcela para un período de 50 años, que tendrá que ser aprobada en todo caso por el pleno municipal. La finca está situada entre las calles D, L, S y E de este polígono, ubicado a las afueras de Magraners y entre las carreteras N-240 y C-13. La parcela está valorada en 1.019.272,56 euros y calificada como un sistema de equipamientos apto para usos religiosos. La construcción del centro y las obras de urbanización necesarias irán a cargo del concesionario, que deberá aportar un canon anual mínimo del 6% del valor de la finca: 61.156,35 €. El criterio de valoración de las ofertas tendrá en cuenta la mejora del canon. Las construcciones, instalaciones y mobiliario pasarán de pleno derecho a posesión y titularidad del ayuntamiento cuando acabe la concesión, sin que el concesionario reciba contraprestación.
La asociación Ibn Hazm podría solventar así la falta de una mezquita que sufre desde hace 12 años, cuando la Paeria cerró la de la calle del Nord por exceso de aforo. Sus fieles rezaron en el Palau de Vidre desde 2012 y hasta este septiembre, cuando empezó su reforma. Después fueron al pabellón 4 de la Fira, y a la canalización. Ahora rezan en un cobertizo de la Fira. Este no es el primer intento de dotar a Lleida de una gran mezquita. En 2007, la Paeria firmó un protocolo con el imán para construirla en el polígono El Segre, pero lo acabó rescindiendo por “reiterados incumplimientos”. En 2012 la entidad Aloumma se adjudicó el terreno en un nuevo concurso, pero después acabó renunciando.