PAERIA POLÍTICA
PSC y Junts pactan el presupuesto de 2024 de Lleida, que incluye el nuevo pabellón para la Fira
Prevén que sea “modulable y transportable” para poder aprovecharlo si el recinto ferial se traslada
También acuerdan que la aprobación urbanística del plan de la estación esté lista el próximo año
El gobierno municipal del PSC cerró ayer con el grupo municipal de Junts un acuerdo para aprobar el presupuesto del próximo año que incluye la construcción del nuevo pabellón ferial, agilizar los trámites urbanísticos del Plan de la Estación y abrir un museo de historia de la ciudad, entre otras medidas. El acuerdo, además de permitir la aprobación de las cuentas en el pleno del próximo viernes, ya que los 9 ediles socialistas y los 5 de Junts suman mayoría absoluta, confirma a estos últimos como socio preferente del PSC. Y es que su voto a favor ya ha sido clave para aprobar las ordenanzas fiscales y para licitar un solar municipal para habilitar un centro de culto. Además, también apoyan la prórroga de dos años de la concesión del servicio de autobuses urbanos.
“El de hoy es un acto que hace buena a la política”, dijo Larrosa nada más empezar, destacando que este acuerdo llega 10 años después del último que alcanzaron los socialistas y la antigua CiU en la Paeria. El alcalde agradeció “la valentía, generosidad y ganas de pactar” de Junts. A su vez, remarcó que “presentamos el presupuesto hace 17 días y no hemos recibido ni una propuesta de ERC y PP, todo queda dicho”.Por su parte, Cervera destacó la profundidad del acuerdo alcanzado, subrayando que “hemos querido poner a la ciudad por delante, es nuestra manera de entender la política”. Destacó que el acuerdo prioriza el desarrollo económico de la ciudad y que la meta es “poner Lleida por delante de cualquier cosa y darle potencial y fuerza para ejercer como segunda capital de Catalunya”.
Destacó que con este acuerdo “no somos los socios del PSC, somos los socios de la ciudad”, y añadió que “queremos ser unos socios fiables y cumplir lo pactado. Los ciudadanos están cansados de rifirrafes que no llevan a nada y solo bloquean proyectos”, concluyó. Tanto Larrosa como Cervera señalaron que se llegó a sondear un pacto de gobierno. La portavoz de Junts lo descartó alegando que “hemos tenido un debatre interno sobre esta cuestión, pero nos sentimos más cómodos estando en la oposición de forma constructiva y responsable”.
Respecto al contenido del pacto (ver claves), lo más llamativo es la construcción del pabellón 5, ya que el PSC se mostró en contra el pasado septiembre. Cervera detalló que se ha acordado hacerlo para que sea “modulable o transportable al nuevo recinto ferial una vez se hagan sus trámites”. El pabellón lo financiarán Generalitat, Diputación y Paeria y esta última hará una aportación de 220.000 euros el próximo año. Sobre el plan de la estación, han acordado aprobarlo provisionalmente en el primer trimestre de 2024 y que la definitiva sea a finales de año. Los dos grupos se reunirán cada mes para hacer un seguimiento del pacto “y de las actuaciones que se deriven tanto en el escenario presupuestario de 2024 como en ulteriores ejercicios”, de modo que este acuerdo podría prorrogarse más allá del próximo año.
El PP ve decadencia y ERC, que Junts traiciona su legado
Los otros partidos de la oposición se mostraron muy críticos con el pacto alcanzado entre PSC y Junts para el presupuesto, ya que aseguran que se dejan de lado temas como la seguridad y la limpieza. Así lo asegura el jefe de la oposición y líder del PP, Xavi Palau, que señala que el pacto se olvida de estos temas, así como “la promoción económica, el deporte y las ayudas a los más necesitados”. Añadió que el acuerdo “dibuja una Lleida conformista y en blanco y negro con unas políticas continuistas que nos llevan a la decadencia”. Por su parte, el grupo de ERC también dijo que el pacto se olvida de la seguridad y la limpieza y que las aportaciones de Junts “no suponen un impacto real para la ciudadanía”. Especialmente duros fueron con Junts, su socio de gobierno el pasado mandato, al que acusaron de “vender el legado de los últimos 4 años a un precio muy barato”. Desde Vox criticaron que “la limitación temporal y la falta de información” les obstaculizó analizar las cuentas en profundidad, mientras que el Comú lo ve un pacto “poco ambicioso” en vivienda, transporte público y energías renovables.