TRIBUNALES SENTENCIA
Condenado a pagar 252.838 euros por un incendio en su taller en Alcarràs
El responsable de la empresa debe indemnizar a los propietarios de la nave, que tuvo que ser demolida
Se produjo por una negligencia en la instalación eléctrica
La Audiencia de Lleida ha condenado al responsable de un taller de Alcarràs a indemnizar con 252.838 euros a los propietarios de la nave donde había el negocio por ser el responsable de un incendio que destrozó el inmueble. El fuego se produjo el 18 de diciembre del año 2018 en el número 140 de la avenida Catalunya. La nave tuvo que ser demolida y reconstruida por los severos daños que sufrió. Los propietarios, representados por el abogado Enric Rubio, demandaron al responsable del taller. El tribunal ha ratificado la condena del juzgado de Primera Instancia número 1 de Lleida y ha elevado la indemnización que inicialmente se fijó en 204.600 euros. Es decir, 48.238 euros más al estimar los recursos de apelación interpuestos por los titulares de la nave. En total, 252.838 euros a los que deberán hacer frente el responsable del taller y su aseguradora.
Los peritos determinaron que la causa del incendio era imputable al demandado. Concretamente, y según la de primera sentencia que ahora no se ha discutido, “el origen del incendio se ubica en una caja de material plástico que conformaría una base de enchufes, siendo la fuente de ignición la energía eléctrica, como consecuencia de un sobrecalentamiento por mal contacto de los bornes de conexión de la base de enchufes, que al parecer no se hallaba correctamente anclada a la pared y que estaba situada detrás de una pila de neumáticos usados”.
También se ratifica que el responsable del incendio fue el propietario del taller al considerar se que su conducta fue negligente “al mantener en situación irregular un elemento de la instalación (la base de enchufe a la que se conectaban varios aparatos eléctricos), generando un peligro”. En la extinción trabajaron diez dotaciones de los Bomberos y se tuvo que desalojar, de forma preventiva, a los vecinos de los edificios cercanos. Ardieron varios coche.