SERVICIOS VULNERABILIDAD
Vecinos de un bloque del Barri Antic denuncian sufrir acoso inmobiliario
El 19 de febrero les cortarán el agua porque el titular del inmueble, una inmobiliaria, no paga a Aigües de Lleida
“Quieren echarnos del edificio, es desesperante”
Los 16 vecinos del número 16 de la calle Caldereries se quedarán sin agua corriente a partir del 19 de febrero porque la propiedad del edificio, la inmobiliaria Firg Pyrene SLU, no ha abonado la deuda que tiene con Aigües de Lleida. Un hecho que es el último ejemplo de “acoso inmobiliario” que aseguran sufrir por parte de esta empresa desde hace meses, ya que además de no pagar el agua tampoco ha arreglado el ascensor ni la puerta de entrada del inmueble, lo que provoca que cada día entren drogadictos a pincharse y a pernoctar. De hecho, denuncian que hace varios días que hay una pareja que duerme en el cuarto de contadores, donde también orinan, comen y se drogan.
Los vecinos no tuvieron constancia de que iban a sufrir el corte de suministro hasta que la concesionaria se lo notificó hace unos días. Señalan que “el edificio tiene un contador comunitario y el gasto del agua está incluido en el precio del alquiler, por lo que nosotros hemos ido pagando lo que nos tocaba y según lo acordado, pero por lo visto la propiedad no ha ido abonando los recibos”. Añaden que en ningún momento la propiedad les pasó ninguna factura de consumo y que ahora sufren una situación de indefensión, ya que “estamos pagando por un servicio que nos van a cortar porque a la propiedad no le da la gana pagarlo”, y avisan que en el edificio hay familias con hijos y personas vulnerables con problemas de movilidad. Es por ello que ayer presentaron en la Oficina Municipal de Atención Ciudadana (OMAC) una solicitud para evitar el corte de suministro y también prevén exigir responsabilidades a Firg Pyrene SLU por la vía judicial.Por su parte, un responsable de Aigües de Lleida confirmó ayer que el edificio en cuestión tiene “una importante deuda” en el pago del suministro. Señaló que al tener un contador comunitario solo figura un titular, que en estos casos suele ser el titular del edificio, por lo que no se puede identificar si hay personas en situación de vulnerabilidad. El portavoz añadió que antes de notificar el corte de suministro se analizó si alguno de los vecinos figuraba como vulnerable para los servicios sociales del ayuntamiento y, al no haber ninguno, se les informó del corte de suministro.Este diario no pudo contactar ayer con ningún responsable de Firg Pyrene SLU, pero sí que con el encargado de la gestión de los arrendamientos. Al ser preguntado por el corte de suministro, alegó desconocer los detalles del problema y solo señaló que “los vecinos van pagando lo fijado en los contratos de alquiler”.Los vecinos temen que después del corte del agua vendrá el de la luz, ya que también la pagan a través del contrato de alquiler. “Nos quieren hacer la vida imposible para que nos hartemos y nos vayamos para reformar el edificio y venderlo todo nuevo, no tengo dudas”, lamentó una vecina, que recordó que la propiedad se comprometió hace meses a arreglar tanto el ascensor como la puerta de entrada para evitar que entren intrusos. “No han hecho nada, el ascensor sigue averiado, tenemos gente con movilidad reducida y cada noche hay personas que entran en el rellano a drogarse, dormir y dejarlo todo hecho una porquería. Cualquier día entrarán en las casas, es desesperante, te sientes impotente”, concluyó otro vecino.