LLEIDA
Piden hasta 2,5 años de prisión por el encierro en el Rectorado de 2021
La Fiscalía acusa a ocho personas por desórdenes públicos y a cuatro de ellas también por atentado a la autoridad
Ocurrió el día de la detención de Pablo Hasél
La Fiscalía pide penas de entre seis meses y dos años y medio de prisión para ocho personas acusadas por los daños causados durante el encierro en el edificio del Rectorado de la UdL en febrero de 2021 para evitar la detención del rapero Pablo Hasél. Según el escrito de acusación del Ministerio Público, a ocho personas se las acusa de un delito de desórdenes públicos, por el que solicita una pena de seis meses de cárcel para cada uno. Asimismo, a cuatro de ellas también les imputa un delito de atentado a agentes de la autoridad, por lo que pide 2 años de prisión para cada una.
Asimismo, la Fiscalía, que ha elevado su calificación a un juzgado de lo Penal, solicita aque los ocho acusados paguen una indemnización de 86.503 euros por los daños causados en el campus. Según el escrito del Ministerio Público, los acusados entraron el 15 de febrero ede 2021 en el Rectorado de la UdL y, después de encerrarse en su interior, “hicieron barricadas en los accesos del edificio para evitar que nadie entrara o saliera y para impedir que los Mossos d’Esquadra pudieran arrestar a Pablo Hasél”. Asimismo, la Fiscalía sostiene que los acusados “forzaron dependencias y despachos de la UdL que los empleados ya habían cerrado con llave” y que utilizaron diversos material, como extintores. En este sentido, la Fiscalía acusa a cuatro de un delito de atentado a la autoridad al señalar que, una vez que los agentes lograron llegar hasta la tercera planta donde se encontraba Hasél, vaciaron extintores contra los agentes, llegando incluso a tirárselos una vez vacíos, sin que conste que llegaron a impactar contra los mossos. El Ministerio Público señala que los congregados, entre los que se encontraban los acusados y otras personas no idenfiticadas, hicieron una cadena humana para evitar el arresto del rapero, lo que obligó a los agentes a “quitarlos uno por uno”. Asimismo, sostiene en su escrito que se alteró “el normal funcionamiento del campus, se suspendieron las clases de la Facultad de Letras, se impidió las entradas y salidas al campus y se tardó una semana en reparar los daños sufridos, que cuantifica en 86.503 euros. Los Mossos, finalmente, procedieron al arresto de Hasel la mañana del 17 de febrero de 2021 para cumplir la condena de Audiencia Nacional por los delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias a la corona. Tras el arresto, hubo una marcha que acabó con graves disturbios que se saldó con ocho detenidos y seis policías heridos. Un grupo de manifestantes montó barricadas y quemó contenedores y dos motos de la Guardia Urbana.