Agredidos 45 funcionarios en 2023 en la cárcel de Lleida, más del doble en 5 años

Las agresiones a funcionarios de la cárcel de Ponent a manos de presos se han incrementado más del doble en cinco años y en 2023 alcanzaron los 45 casos, según un informe publicado ayer por el sindicato Csif. En el conjunto de Catalunya, denuncian que las agresiones graves a funcionarios aumentaron un 54% el año pasado, siendo el centro penitenciario Brians 2 de Sant Esteve Sesrovires el que acumula más, con un total de 24.

La situación en la prisión leridana también es alarmante, según el sindicato. De las 45 agresiones registradas el año pasado, dieciocho de ellas fueron graves. En total, se produjeron 62 incidentes y los funcionarios agredidos estuvieron 280 días de baja −un 83% más respecto a los 153 días de 2022−. Según el sindicato, se elevaron al juzgado 42 denuncias por estos hechos. En 2023 había 635 internos en la cárcel de Ponent, frente a los 587 del año anterior. Asimismo, se produjeron 68 tentativas de agresión a funcionarios por parte de presos frente a los 26 casos de 2022. En los últimos cinco años, el sindicato ha contabilizado 146 agresiones a funcionarios y otras 136 tentativas. “No podemos hablar ni de mejora ni de reducción de incidentes; estas cifras no permiten ser optimistas y las agresiones al colectivo de trabajadores de los servicios penitenciarios de Catalunya continúan siendo una auténtica lacra”, lamenta el Csif, mientras denuncia que cada día se producen una media de 1,6 agresiones a funcionarios en las diferentes prisiones catalanas. “Somos un colectivo hiperagredido, tanto física como psicológica e institucionalmente”, asegura este sindicato, que critica que la falta de medidas coercitivas como los aerosoles o las pistolas eléctricas hacen que la población reclusa “se sienta libre de agredir a los trabajadores”. Por enésima vez, también reclamaron la aprobación por parte de las Cortes Generales de la condición de agentes de la autoridad para el colectivo.

Más de cuarenta empresas trabajan con el CIRE del área de Lleida

Cuarenta y dos empresas catalanas, la mayoría leridanas, contratan al Centre d’Iniciatives per a la Reinserció (CIRE) para desarrollar la producción total o parcial de sus productos en el Centre Penitenciari de Ponent, en el taller exterior de Raimat y en el Centre Educatiu de Justícia Juvenil El Segre. Actualmente, en estos centros trabajan 181 internos, de las cerca de 3.500 que producen directamente para el CIRE en toda Catalunya. Entre los trabajos que llevan a cabo dentro de los centros penitenciarios hay labores de imprenta, carpintería, cerrajería, montaje, confección, mantenimiento y servicios exteriores, además de las labores propias en los centros. Para intensificar la relación con el tejido empresarial de la zona, el CIRE organizó ayer una jornada en la sede del Govern en Lleida.