LLEIDA
La prisión de Lleida aparta de la cocina a 5 internos condenados por delitos de sangre
Tres por homicidio y dos por actos violentos, tras el asesinato de una cocinera en la cárcel de Mas d'Enric en Tarragona
Medida adoptada por la dirección del penal tras la alarma causada por el crimen
Las prisiones de Ponent y de Lledoners (Bages) han decidido apartar de la cocina a los internos que cumplan condenas por homicidio u otros delitos de sangre, avanzó ayer TV3 y confirmó SEGRE. Según ha podido saber este diario, la recolocación se llevó a cabo antes del incidente que tuvo lugar el sábado en la cárcel de Lleida, en la que hubo una pelea entre dos internos en la cocina y dos funcionarios resultaron heridos al reducir a uno de ellos, con antecedentes de agresividad.
Fuentes del departamento de Justicia señalaron a este diario que, respecto a la cárcel de Ponent, si algún director y la junta de tratamiento han considerado preventivamente que es necesario cambiar de destinación a algunos internos, no hay ningún problema, ya que la prioridad es reforzar la seguridad y la percepción de seguridad. Al respecto, añadieron que “son movimientos naturales” en el contexto actual en el que “la prioridad es que internos y trabajadores estén seguros”.
Asimismo, indicaron que esta recolocación va en la línea de la revisión de los criterios para decidir que un interno pueda acceder a la cocina, según anunció la consellera de Justicia, Derechos y Memoria, Gemma Ubasart.
Sin embargo, las mismas fuentes desvincularon el caso de Lledoners del asesinato de una cocinera en Mas d’Enric a manos de un interno. Al respecto, trabajadores de Ponent confirmaron a este diario la recolocación de internos y algunos la calificaron de “insuficiente” (ver desglose).
En Lledoners, según apuntaron trabajadores a ACN, agradecieron el cambio a la dirección a la vez que lamentaron que el departamento “no ha movido ficha” en dos semanas, desde el asesinato de la cocinera en Mas d’Enric.
En su comparecencia en el Parlament la semana pasada, Ubasart explicó que habría medidas inmediatas para reducir los riesgos en las prisiones como aumentar los vigilantes en las cocinas y otros servicios y poner más dispositivos de alerta a disposición de los trabajadores.
También reforzar el personal de cocina en determinados turnos y la revisión de los protocolos de seguridad en los espacios que comparten los trabajadores con los internos. Tras el asesinato de Mas d’Enric, el conflicto se ha intensificado, ya que los trabajadores de prisiones afirman que llevan años denunciando el aumento de las agresiones. La semana pasada hubo dos relevantes en Ponent que se saldaron con seis funcionarios heridos.
Trabajadores piden ir “más allá” y externalizar cocina y cafetería
Trabajadores del Centre Penitenciari Ponent calificaron ayer de “insuficiente” la medida de cambiar de ubicación a internos con delitos de sangre de la cocina de la cárcel y pidieron “ir más allá”. Por ello, reclamaron “externalizar” tanto este servicio como el de la cafetería de funcionarios, ya que “igualmente aquí tienen acceso a cuchillos u otros objetos peligrosos”. Otros funcionarios calificaron de “correcta” la medida y pidieron extenderla a otros servicios en los que los presos puedan tener acceso a objetos peligrosos . Asimismo, señalaron que en los últimos días se han vuelto a vivir incidentes, como peleas, en la cárcel de Lleida. “Lamentablemente es la dinámica habitual”, afirmó uno de los trabajadores a este diario. Las conversaciones con la Generalitat continúan estancadas y los funcionarios siguen reclamando dimisiones en la cúpula de la conselleria de Justicia y esperan a un cambio de Govern.