Tecnología de los Mossos d'Esquadra contra el crimen

La Policía Científica de los Mossos d’Esquadra ha dado un salto tecnológico ante la proliferación de las armas de fuego en Catalunya y el crimen organizado y ha incorporado nuevos equipos. Además de mejorar los análisis forenses relacionados con balística, también avanzan las técnicas en inspección ocular, detección de huellas y ADN.

Los Mossos d’Esquadra han incorporado equipos con alta tecnología para luchar contra las nuevas formas de delincuencia y el auge del uso de armas de fuego. Un proceso de modernización que les permitirá mejorar la eficiencia de los estudios forenses y la resolución de investigaciones criminales. Vestidos con bata blanca, agentes de la División de la Policía Científica muestran a SEGRE las diferentes disciplinas forenses en una visita al Complejo Central Egara, que la Policía catalana tiene en Sabadell. Podemos ver el archivo con casquillos y balas de decenas de hechos delictivos, la sala donde se prueban las armas y se recogen proyectiles en un tanque de agua, billetes y documentos falsificados o imágenes de huellas y retratos robots. Lidera la visita el jefe de la Policía Científica, el inspector Xavier Sellart, natural de Bellvís. “Hemos dado un paso muy importante y necesario porque la evolución tecnológica lo transforma todo”, asegura. Las herramientas que ha comprado el cuerpo son siete, con una inversión de un millón de euros, y “en balística nos han cambiado la especialidadLa primera adquisición es un sistema automático de identificación balística, de nombre Evofinder, que detecta micromarcas de casquillos y balas, y permite contrastarlas con otros. “Una vez en el archivo, se pueden comparar y saber si están relacionados con otros delitos”, explica el sargento Xavi Garrido, responsable de la unidad central de Balística y Trazas Instrumentales. “Ayuda a gestionar el archivo de anónimos y hace de filtro para trabajar de forma más rápida”, añade. Otro salto importante es un equipo de laboratorio químico denominado iForenLibs que permite rastrear un objeto y detectar y cuantificar los elementos químicos que contiene. Así, permite determinar a qué distancia se ha producido un disparo. También han adquirido una cámara de alta velocidad que hace grabaciones de disparos con un millón de imágenes al segundo, y un microscopio electrónico capaz de detectar la composición de los químicos implicados en un disparo. En el campo de las trazas instrumentales, Garrido explica la incorporación del ToolScan, para hacer comparativa milimétrica de las lesiones que causan herramientas en objetos, como las usadas en robos, y el TrasoScan, que identifica pisadas y permite compararlas con otras de forma mucho más precisa. “Podemos tener una muestra de solo unos milímetros y la máquina nos permite verla en 3D”, señala. 

La inspección ocular del lugar de los hechos es clave en la labor de la Policía Científica, remarca Sellart. “Una huella puede ser una condena”, recuerdan. Para ello se han incorporado novedades para ver la escena en 3D como el escáner Faro, que hace una reconstrucción mostrando las trayectorias de disparos y ubicaciones del tirador, víctima o testigos. También cuentan con la cámara 360 para visualizar todos los detalles. “Es la tecnología que aplicamos a la captura de la escena para poder enseñarlo de forma gráfica en los tribunales”, explica el subinspector Robert Trench, coordinador regional de la División. En este avance tecnológico, la Inteligencia Artificial está presente. De hecho, ya están experimentando su uso en la elaboración de retratos robots así como en la detección de sustancias estupefacientes. En este último caso, Sellart asegura que está en fase experimental el uso de un equipo que permite detectar en segundos el tipo de droga y su pureza. También habrá novedades en genética, con una renovación del laboratorio y máquinas como la de secuenciación masiva para poder hacer estudios genotípicos. “Nos podrá dar información sobre el color de la piel, ojos o cabello y su origen”, explican los expertos de genética forense. El ADN pesa mucho a nivel judicial. “Para los jueces es una prueba directa de cargo por la que se dictan sentencias”, recuerdan. de arriba a abajo”, remarca.

Xavier Sellart: "De nuestros dictámenes puede
depender una condena"

Inspector y jefe de la división de la policía científica de los Mossos d'Esquadra

¿Qué supone para el cuerpo de los Mossos d’ Esquadra la incorporación de los nuevos equipos? 

La tecnología nos está transformando las ciencias forenses como está pasando en otras ramas. Todas las unidades la están incorporando. Hemos validado nuevos métodos que nos hacen ser mucho más precisos y eficientes. Es absolutamente necesario porque necesitamos trabajar con más fluidez y mucha más certeza. 

¿Permite mantener al cuerpo como un referente? 

Esta es la idea. Queremos dar una buena respuesta a las necesidades de los investigadores, aunque trabajamos con independencia porque nosotros no hacemos conclusiones, aportamos lo que hemos encontrado. Con los resultados que emitimos muchas veces puede haber un veredicto de culpabilidad de una persona. Debemos ser muy rigurosos, ya que pueden hacer que una persona vaya a prisión o evitar que lo haga un inocente. 

¿Cuántos efectivos tiene la División de la Policía Científica? 

Somos 530 efectivos, de los que 400 están en el territorio. Estos están asociados sobre todo a la inspección ocular de los lugares de los hechos. Aquí hacemos estudios forenses con laboratorios de química, ADN y balística, y más de una decena de especialidades forenses. 

¿Qué tipo de formación deben tener los miembros de la unidad? 

Los que están en laboratorioson principalmente químicos y farmacéuticos y en el caso de genética hay titulados en biotecnología, bioquímica, biomedicina, biólogos, veterinarios... En balística tenemos físicos y también ingenieros industriales y químicos. Tenemos una amplia variedad de expertos. 

¿Y en su caso? 

Yo procedo de las ciencias sociales, pero llevo toda mi vida profesional vinculado con la investigación criminal. Soy de los veteranos de la casa. Desde 1991 soy mosso y desde 1996 estuve en policía judicial en investigación del crimen organizado. En los últimos cinco años he sido el jefe de la División de Policía Científica. 

¿Hay en marcha un nuevo modelo de Policía Científica? 

Además de los nuevos equipos, la otra parte es el cambio de modelo organizativo, ya que todos los efectivos pasarán a depender de la División. Es un cambio que estamos implementando. 

¿Es importante el despliegue en el territorio? 

Es imprencindible. Cuando hay un hecho delictivo no podemos esperar a enviar alguien desde Sabadell, sino que la respuesta debe ser inmediata. 

¿Este cambio responde a la nueva delincuencia? 

Estamos trabajando la mayorparte de casos de crimen organizado o delincuencia especializada. Los grupos criminales utiizan nuevas tecnologías y nos tenemos que adaptar y ponernos al día. La evolución de la tecnología lo transforma todo. 

¿También con el uso de la Inteligencia Artificial?

 Ya tenemos algunos equipos que la utilizan. En el caso de los retratos robots, se está experimentando para que sean los propios agentes que recogen la denuncia los que puedan hacerlo. Para ello debemos implementar filtros para ofrecer varias opciones basadas en las características que aportan los testigos o las víctimas. 

¿Cómo es la colaboración con otros cuerpos policiales? 

Estamos a punto de entrar en el sistema ABIS para colaborar en reconocimiento facial como ya hacemos con huellas, con el SAID, y ADN, con el Codis. Es una colaboración a nivel estatal y europeo. El trabajo en red es cada vez mayor. También formamos parte de la Red de Laboratorios Forenses Oficiales de España y de la red europea de laboratorios forenses Enfsi. 

También habla de la importancia del rigor... 

Todos los procedimientos se someten a normativas de calidad y cada año pasamos una auditoría general de la Entidad Nacional de Acreditación. Nos lleva mucho trabajo y esfuerzo pero quiere decir que hay rigor y este es un aspecto muy importante