Una mujer identificó y fotografió en la calle en Lleida a un hombre a quien acusa de violarla el año 2020
El acusado, que se enfrenta a 9 años de prisión, ha negado los hechos en el juicio en la Audiencia
Una mujer ha declarado este jueves en la Audiencia de Lleida que en diciembre del año 2020 ejercía de prostituta a la ciudad cuándo un hombre que se había encontrado en la calle la siguió hasta su piso. Una vez dentro, el hombre la "forzó" a tener relaciones sexuales y también le pegó y le metió una navaja en la garganta.
Dos días después, se encontró el supuesto agresor en la calle y le pudo hacer unas fotografías, aunque este la amenazó de muerte, ha dicho. Más tarde, la mujer presentó la denuncia a la policía y les facilitó las imágenes que había hecho. El hombre fue detenido. Él ha admitido que tuvo relaciones con la denunciante, pero ha negado tanto haberla violado, pegado como amenazado. El fiscal le pide 9 años de prisión.
La Audiencia de Lleida ha acogido este jueves un juicio complejo, ya que ha sido necesaria la intervención de hasta tres intérpretes para traducir las declaraciones del acusado y la denunciante, que ahora vive en el extranjero y ha ofrecido su relato a través de un sistema de videoconferencia. En su declaración, la mujer explicó que el 9 de diciembre de 2020 trabajaba como prostituta en Lleida. Ese día se encontraba el Centro Histórico de la ciudad cuando un hombre "al que no conocía de antes" la "siguió" hasta su piso. Una vez dentro, empezaron a "pelearse" y éste la "forzó" para tener relaciones sexuales. Además, "me golpeó en la cara y me metió una navaja en el cuello", aseveró.
La mujer ha remarcado que pidió varias veces al acusado que "parara" mientras la violaba, y que intentó llamar a la policía, pero el hombre le intentó impedir hasta que se marchó. Sin embargo, se encontró al hombre por la calle dos días después y pudo hacerle unas fotografías. Según dijo, él le hizo un gesto que ella interpretó como "una amenaza de muerte". Luego denunció los hechos a la policía y les entregó las fotos que identificaban al supuesto agresor.
Por su parte, el acusado ha explicado que ambos tuvieron relaciones sexuales de mutuo acuerdo y que la mujer no le dijo en ningún momento que se detuviera. "Estaba borracha y empezamos a discutir. Cambió de actitud, me empujó y me golpeó en la cabeza mientras gritaba que le había violado. Acto seguido me fui a casa para curarme la herida de la cabeza", declaró. .
Así, el hombre ha negado también intentar sacarle el móvil y que le amenazara con el cuchillo o cuando le fotografió en la calle dos días después de los hechos. "Cuando me tomó la foto me di cuenta de que quería denunciarme", expresó.
En el juicio ha declarado también el agente de policía que cogió declaración a la denunciante. Explicó que la mujer estaba "afectada" por los hechos y les facilitó unas fotografías del agresor. Asimismo, un médico forense ha precisado que la denunciante presentaba una vez en la zona del ojo días después de los hechos.
El fiscal consideró que la presunción de inocencia del acusado quedó "desvirtuada" con la declaración de la víctima, que se ha "mantenido en el tiempo" y que prueban que "en ningún momento" consintió las relaciones sexuales , las cuales se produjeron porque el hombre "la golpeó". Así, el Ministerio Fiscal solicita para el acusado 9 años de cárcel por la agresión sexual seguidos de 7 años de libertad vigilada y 10 sin poder acercarse a menos de 200 metros de la víctima o comunicarse con ella .
También quiere que indemnice a la mujer con 7.000 euros por los daños morales causados. Además, acusa al hombre de un delito leve de lesiones y un delito leve de amenazas, por los que quiere que pague una multa de unos 1.000 euros, así como la cantidad de dinero que se determine que valía el móvil que va romper.
Por otra parte, la defensa solicitó una sentencia absolutoria. El abogado consideró que "no existe prueba de carga suficiente" ni ninguna prueba periférica "relevante" para enervar la presunción de inocencia de su representante. En este sentido, indicó que no niega la agresión denunciada, pero "sí la autoría", en referencia a la circunstancia de que la mujer pudo tener varios clientes ese día.
Además, indicó que la mujer denunció los hechos 7 días después de que tuvieran lugar, por lo que el informe del médico forense sobre el golpe en la cara que presentaba o las fotografías que entregó a la policía del acusado "no deberían ser suficientes para que se aporten tarde". En caso de que se dicte una sentencia condenatoria, la defensa pide que se aplique a su representado los atenuantes de estar bajo la influencia de las drogas y de dilaciones indebidas.