Las conexiones ilegales en el barrio de la Mariola de Lleida gastaban tanta luz como 3.241 pisos

La compañía Endesa ha abierto en tres años 168 expedientes en la Mariola por fraude eléctrico, es decir, conexiones ilegales a la red, que se derivaron en 103 cortes de suministro. El 3 de enero practicó 52 inspecciones que derivaron en 28 cortes. 

Las pérdidas de electricidad fueron de 997.968 kW mensuales, es decir, 11.975.616 kW en todo el año, consumo equivalente al de 3.421 viviendas. La compañía indica que tras esa actuación, ejecutada en un solo centro de transformación, el consumo cayó a un tercio.

Además de este, desde 2022, los técnicos han efectuado otros tres operativos en la Mariola, siempre acompañados de los cuerpos de seguridad. En concreto, el 31 de enero de 2022 practicaron 19 inspecciones que dieron como resultado 13 cortes de electridad de conexiones ilegales. 

En 2023 hubo dos operaciones, una el 26 de enero con 68 inspecciones y 42 cortes, y otra el 16 de febrero, con 29 y 20. No obstante, la compañía precisa que de ese año solo dispone de las cargas suministradas a dos de los cuatro centros de transformación que alimentan al barrio. 

En todo caso, detalla que las pérdidas totales fueron entonces de 439.844 kW al mes, lo que supone 5.278.128 kW en todo el año, cifra equivalente al consumo anual de 1.508 viviendas (el consumo medio de un hogar es de 3.500 kW al año).

Como publicó este diario, la energía defraudada en toda la ciudad de Lleida por ‘pinchazos’ en la red el año pasado fue de 3.572 MWh, cifra equivalente a la potencia de más de tres centrales nucleares como las de Catalunya.

Abre el centro operativo de la Urbana en el barrio

El centro operativo de la Guardia Urbana en la Mariola que la Paeria anunció hace dos semanas se puso en marcha ayer en el centro cívico del barrio, situado en el número 1 de la calle Artur Mor, donde dos agentes fijos atienden las consultas o denuncias de los vecinos de lunes a viernes, entre las 11.00 y las 12.00 horas y de 17.00 a 18.00 horas. 

El dispositivo se refuerza con ocho agentes de la Unidad Polivalente Operativa (UPO), que patrullarán las calles de la Mariola a partir de las 19.00 horas y hasta la madrugada, también los fines de semana. Ayer se sumaron a las patrullas ordinarias, ya que “no estamos desmontando nada, sino que reorganizamos el servicio de la ciudad para dar una mayor intensidad en la Mariola, con el objetivo de avanzar en civismo, que contribuya a hacer entender cuáles son las normas de convivencia y, por supuesto, que actúe cuando se produzcan hechos que puedan ser delictivos”, explicó el alcalde Fèlix Larrosa.

El dispositivo estaba contemplado en el plan de acción municipal y el plan local de seguridad, pero la Paeria aceleró su puesta en marcha a raíz de los últimos sucesos delictivos, como un apuñalamiento el pasado 19 de mayo en la plaza Riu Flamisell.