LLEIDA
El 35% de los vecinos de Lleida ciudad viven en zonas que son islas de calor
Pueden registrar hasta 13 grados más de temperatura que las áreas más arboladas
Más de un tercio de los vecinos de Lleida ciudad viven en zonas con efecto isla de calor, un fenómeno que puede provocar diferencias de hasta 13 grados de temperatura respecto a áreas más arboladas. Así lo destacan varios informes de la Paeria, que de cara al futuro prevén unos veranos más tórridos con olas de calor más largas.
Un total de 47.383 habitantes de Lleida ciudad, casi el 35% de su población, viven en zonas con efecto isla de calor, el fenómeno con el que se conoce el aumento de temperaturas por culpa de la actividad humana o la ausencia de zonas verdes, y en algunas la diferencia con respecto otras áreas más resguardadas puede llegar a ser de hasta 13 grados. Así lo constatan los informes de sostenibilidad que elaboró el ayuntamiento entre 2021 y 2022, que destacan que el efecto isla de calor se nota especialmente en los barrios de Balàfia, Príncep de Viana-Clot, Pardinyes y los polígonos industriales. Por otro lado, corroboran que desde principios de siglo han aumentado los episodios de olas de calor en la provincia, así como su intensidad. También constatan que desde el año 2000 la temperatura media en verano ha aumentado en 1,2 grados, mientras que su valor más extremo ha subido 2,1.
Los estudios determinan que las zonas con mayor temperatura superficial son los polígonos industriales por la concentración de materiales de construcción y naves y la escasez de zonas verdes. No obstante, constatan “un efecto y causas similares” en las zonas de Príncep de Viana-Clot y Rambla Ferran-Estació y ponen como prueba de ello una muestra de las temperaturas superficiales registradas el 31 de julio por la mañana: en la Mitjana y la canalización el mercurio marcaba 31,3 grados, mientras que en zonas puntuales de estos últimos barrios era de 44,2. Por contra, Joc de la Bola, Raimat, Ciutat Jardí, Sucs, Camp d’Esports y Llívia son los barrios con menos islas de calor. Para conseguir que esto ocurra en el conjunto de la ciudad, el estudio del ayuntamiento aboga por aplicar tres métodos: aumentar las áreas verdes arboladas, sustituir los pavimentos de plazas y calzadas por materiales permeables y aplicar tratamientos para transformar las cubiertas de edificios con superficies frescas o implantar cubiertas vegetales.
Balàfia, Príncep de Viana-Clot y Ferran- Estació son los barrios de la capital con más islas de calor
El calentamiento global ya se deja notar en Lleida, ya que los informes de la Paeria constatan que en los últimos 40 años la temperatura máxima de promedio en verano ha ido aumentando progresivamente. Entre 1981 y 1990 se incrementó en 1,29 grados, mientras que entre 2000 y 2020 la subida fue de 1,2. A su vez, las temperaturas máximas extremas se han incrementado en 2,1 grados. Un fenómeno que ha ido de la mano con un aumento de la duración de las olas de calor, que han pasado de ser de 3-4 días entre 2003 y 2015 a 4-5 en los últimos años. Y la cosa no se quedará aquí, ya que los estudios prevén que la duración de las olas de calor en el segundo tercio de este siglo será de entre 7 y 14 días, y para el último tercio estos episodios llegarían a los 20 días.
Mala calidad del aire en la capital y el Prepirineo
Un estudio de Ecologistas en Acción constata que el aire de Lleida ciudad tiene unos niveles de concentración de partículas sólidas o líquidas de hollín, ceniza, cemento u otras partículas metálicas (PM10) superiores a los nuevos límites legales. Una situación que también ocurre en el Prepirineo en los que respecta a la contaminación por ozono. El estudio concluye que el 75% de los catalanes respira aire contaminado.