Rotondas de Lleida que son un atasco: coches obstruyen otros coches cuando un semáforo se pone rojo

El objetivo de las rotondas es mejorar, además de la seguridad, la fluidez del tráfico en los cruces para que haya menos atascos que en una intersección tradicional, pero algunas de la ciudad consiguen lo contrario. 

Uno de los ejemplos más flagrantes, motivo de quejas de vecinos, es la glorieta entre las avenidas de Pinyana y Rovira Roure, junto a los jardines del hospital Arnau. La mayoría de atascos ahí suceden cuando el semáforo para salir de la rotonda e ir hacia el centro por Rovira Roure se pone rojo para los vehículos, ya que suelen obstruirla al quedarse parados en sus dos carriles. 

Se ven afectados los que se quieren incorporar a la misma glorieta desde la avenida de les Germanies, así como los que entran a la ciudad desde la salida de la A-2 del Jardiland.

“El semáforo es necesario porque regula el paso de peatones para ir al hospital, pero este colapso constante se debe solucionar”, valora el presidente de la asociación de vecinos de Ciutat Jardí, Ramir Bonet. Explica que la junta ha recibido varias quejas por golpes entre coches cuando hay atascos, y propone que se pinte una marca vial en forma de cuadrícula amarilla en un tramo de la calzada de la rotonda, sobre todo en el carril interior, para evitar que los vehículos se queden parados en la intersección y permitan el paso de los que no quieren salir por Rovira Roure hacia el centro.

Otra glorieta que ha causado críticas por el mismo motivo es la siguiente de Rovira Roure más próxima al Arnau, la que cruza con la avenida Onze de Setembre. También hay atascos en la de la plaza Europa, cuando se pone en verde el semáforo de peatones de Onze de Setembre.

Reclaman un semáforo en el cruce de la avenida con Vall de Cabó

La asociación de vecinos reclama un paso de peatones con semáforo en la avenida Rovira Roure, a la altura del cruce con la calle Vall de Cabó, porque “muchos vecinos cruzan corriendo y es muy peligroso, sobre todo desde que se eliminó la mediana”, afirma Ramir Bonet, presidente de la junta. 

Asegura que tanto el anterior gobierno municipal como el actual prometieron habilitarlo, pero no han recibido novedades al respecto. Asimismo, recuerda la necesidad de acabar el carril bici en el tramo de delante de Agrónomos, donde se corta de forma abrupta, y de modificar su trazado en el punto donde está interrumpido por un gran árbol. Por otra parte, reitera la demanda de poner una plataforma elevada en la parada de bus de la esquina con Vall de Boí, ya que los vecinos deben invadir el carril bici para subir al bus.