La Paeria dice que los dos detenidos de la PAH agredieron a urbanos

La Paeria defendió ayer la actuación de la Guardia Urbana del jueves por la noche que se saldó con la detención de dos miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) por un delito de atentado a la autoridad, como avanzó SEGRE ayer. Ocurrió en un edificio de la calle Ramón y Cajal y la PAH denunció que una unidad del cuerpo trató de desalojar a tres familias unas horas antes y “había ejercido la violencia y detenido” a dos militantes que intentaban impedirlo.

Desde la Paeria explicaron ayer que los agentes fueron requeridos a las 20.45 horas para dirigirse a la calle Ramón y Cajal, después de que recibieran una llamada de una persona que informaba que había unos jóvenes manipulando la cerradura de la puerta de una vivienda. Ante ello, desde el ayuntamiento afirmaron que los urbanos “intervienen porque son alertados de un posible intento de robo con fuerza. Al ver la presencia policial, los jóvenes intentan cerrar la puerta para evitar la entrada de los agentes. Y es cuando los agentes comienzan a abrirla que se inician las agresiones verbales y físicas”. Los urbanos, según el consistorio, pidieron a los implicados que se identificaran, negándose a ello. También comprobaron que llevaban herramientas (alicates, taladro, estuche de puntas, muela y destornillador). “Los agentes son agredidos físicamente primero por parte de los jóvenes y, en el forcejeo, estos resultan heridos”. Los dos miembros de la PAH fueron detenidos como presuntos autores de un delito de atentado. Además, desde el ayuntamiento aseguraron que “la Urbana actúa dentro de sus competencias al ser alertados por un posible intento de robo con fuerza y en ningún caso por hacer un desahucio de personas, una actuación fuera de su competencia”. Los arrestados fueron llevados al Arnau para ser atendidos y los urbanos también recibieron atención médica.Miembros de la PAH se concentraron de nuevo ayer ante la comisaría de la Urbana y los Mossos. Los dos arrestados quedaron en libertad en esta última comisaría y denunciaron el “abuso policial” y que “nos empezaron a golpear sin motivo alguno”.