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Nueva Balàfia: Una expansión que permitió la unión de los tres “barris nord” de Lleida planificada en 1979
En la década de los 80, todo el espacio situado entre Pardinyes, el Secà de Sant Pere y la calle Penedès en el barrio de Balàfia no estaba urbanizado y solo había campos y descampados. El añorado profesor de Geografía Urbana del Estudi General de Lleida, Joan Vilagrassa, solía hacer con sus alumnos un recorrido por toda la ciudad que incluía esta zona, y les explicaba que el PGM de 1979 preveía la unión de los tres “barris nord” con su urbanización. Entonces parecía una quimera, pero a mediados de los 90 se convirtió en una realidad con la prolongación de Baró de Maials y la Rambla de Pardinyes como ejes principales. Su entorno se edificó rápidamente y se transformó en la nueva Balàfia.
Una de sus particularidades es que el área de la ciudad que concentra más residencias de ancianos, con dos públicas y otras dos privadas separadas por solo una decena de metros. Se habilitó el nuevo campo de fútbol, se construyó la escuela pública Països Catalans, el colegio Mirasan ganó un segundo inmueble y se urbanizaron las plazas de les Magnòlies y Maria Aurèlia Capmany, que pasaron a ser dos de los centros neurálgicos del barrio, que también estrenó un gran centro cívico junto a la segunda. El otro eje principal de todo el sector es la avenida de Balàfia que, al cabo de unos años, se convirtió en un acceso a Ciutat Jardí cuando entró en servicio la avenida de Pinyana.