ESNOTICIA
Piden poner fin a cambios educativos continuos para subir nivel del alumnado
Los docentes quieren estabilidad y recursos para reducir grupos y hacer codocencia
Los alumnos de educación Infantil, Primaria y ESO vuelven mañana a las aulas en un curso que tiene como uno de los principales retos mejorar su nivel, tras el retroceso en el último informe PISA. Para ello, los docentes piden estabilidad, que Educación no aplique continuos cambios y más recursos para reducir grupos y hacer codocencia.
El curso escolar 2024-2025 comienza el lunes para los alumnos de educación Infantil, Primaria y ESO (1,3 millones en toda Catalunya), consolidando de este modo el avance de la vuelta a las aulas antes de la Diada, fecha que la nueva consellera de Educación y Formación Profesional, Esther Niubó, quiere mantener. Precisamente, direcciones de centros, docentes y sindicatos piden estabilidad al departamento, es decir, que no siga la tendencia general de los nuevos gobiernos de introducir cambios educativos continuos para poder consolidar medidas y poder mejorar el nivel de los alumnos, sobre todo de comprensión lectora y matemáticas, en retroceso según el último informe PISA.
Los padres instan a analizar el impacto de las pantallas y las desigualdades en el nivel educativo
Intentar remontar esta situación es uno de los principales retos del curso y Educación anunció que durante el segundo trimestre los centros dispondrán de los documentos de concreción de los aprendizajes básicos de estas materias, como recomendó el grupo impulsor de medidas de mejoras educativas. También se aplicarán programas específicos de mejora de la competencia matemática y la comprensión lectora (ver claves). En este sentido, directores de colegios reconocieron que es necesario reforzar el catalán, “que se está perdiendo”, y potenciar la lectoescritura para “que entiendan los textos”, y ven necesarios más recursos humanos para atender a los alumnos de manera más personalizada, con grupos desdoblados y codocencia en las aulas
Por su parte, la directora de la aFFaC (asociaciones federadas de familias de alumnos de Catalunya), Lidon Gasull, instó a analizar qué parte del empeoramiento de los resultados “es consecuencia de la segregación y las desigualdades sociales”, así como si “la digitalización de la educación ha tenido algo que ver”. Varios directores de centros dijeron que las pantallas son positivas, pero también “abstraen”, por lo que apuestan por trabajar con grupos reducidos de alumnos e incluso por reforzar el uso de “libros y libretas, además de plataformas”.
El director de un centro, por ejemplo, dijo que en Primaria usan una pedagogía innovadora en matemáticas, pero en la ESO trabaja con libros. En este sentido, la portavoz en Lleida del sindicato Ustec, Rosa Aguilà, aboga por “repensar la introducción de las nuevas tecnologías, como ordenadores, tablets o móviles, porque los países más avanzados dicen que hay que frenarla y volver a los libros y los apuntes”. Ve indispensable una “continuidad” en la política educativa, con directrices que duren “5, 7, 10 o más años”, evitando cambios constantes. Otra acción que cree prioritaria es aplicar el decreto de educación inclusiva tal como indica su texto a nivel de recursos humanos y materiales. Por último, incide en que “las familias deben ponerse las pilas, no pueden pretender que todo se haga desde los centros educativos”.
Dice que la labor básica de los docentes debe ser “enseñar y transmitir conocimientos”, y que aunque en cuestiones de valores pueden ayudar, deben abordarse principalmente en la familia. Este extemo en compartido también por directores consultados.
El sistema educativo ha incorporado a más docentes, pero aún faltan en ciertas especialidades
Precisamente, Ramon Panadés, responsable del sindicato Aspepc, que representa a profesores de Secundaria, destaca que “el sistema está enfocado al alumno, y hay que poner el foco en el profesor, en la transmisión de conocimientos, porque lo que ha de hacer un profesor es enseñar”. Apuesta por “recuperar los currículums educativos de hace unos años, porque los actuales se han devaluado mucho”, y pide “transparencia total” en la adjudicación de plazas docentes, que se base en méritos, capacidad y antigüedad, y mejoras laborales.
Mientras, CCOO defiende la reducción de ratios para mejorar los resultados educativos, de forma que en primero de ESO y primer curso de enseñanzas postobligatorias haya 20 alumnos por aula. Pide ampliar la oferta presencial de FP y derogar el decreto de plantillas.
Precisamente, varios centros apuntaron que días previos al inicio del curso todavía no disponían de la plantilla al completo y destacaron que, pese a que en global se ganan docentes, los centros indican que todavía continúan faltando en algunas especialidades, como ocurría antes de los últimos procesos de estabilización.
La aFFac también incidió en este aspecto y espera que se solucione, para evitar que “se levanten las barreras de control de acceso que impiden hacer un filtrado para que lleguen los mejores profesionales” al sistema educativo. Los directores también ven necesarios más profesionales como integradores o educadores sociales y elogian la incorporación de profesorado interino estable. En todo caso, la comunidad educativa aboga por recuperar el prestigio de la profesión docente y del sistema educativo. La conselleria, por su parte, prevé aplicar las mejoras laborales pactadas con los sindicatos, como el cobro de los sexenios (una especie de plus de antigüedad) y la reducción de una hora del horario lectivo a los mayores de 55 años.