La Universitat de Lleida secuencia el genoma de la perdiz roja
La investigación, publicada en ‘Scientific Reportes’, puede ayudar a su gestión y conservación
Una investigación de la Universitat de Lleida (UdL) ha permitido secuenciar el genoma de la perdiz roja (Alectoris rufa), una especie clave en los ecosistemas del suroeste de Europa, donde juega un papel crucial en el equilibrio ecológico. El estudio, en colaboración con la Universitat Rovira i Virgili (URV), se ha publicado en la revista ‘Scientific Reportes’, del grupo Nature. Los resultados de la investigación, en la que han acoplado el 96,9% de los genes, incluyendo codificadores de ARN y proteínas, pueden ayudar a la hora de desarrollar estrategias efectivas de gestión y conservación de estas aves. Combinando paquetes informáticos y procesos de análisis de última generación, el equipo ha estudiado el material genético de 60 ejemplares de perdiz, 30 salvajes y 30 de granja.
El profesor de la UdL e investigador de grupo ‘Biología de sistemas y métodos estadísticos para la investigación’ del IRBLleida, Rui Alves, explica que de todas las aves con genoma secuenciado hasta ahora, hay aproximadamente 9.000 genes que son comunes. De estos han podido encontrar la secuencia “para la gran mayoría en la perdiz”. Los restantes no están porque se han perdido con la evolución o tienen una secuencia de ADN muy diferente de los correspondientes a otras aves y por eso no se han podido identificar.
El personal investigador también ha comparado el genoma de la perdiz roja con la codorniz japonesa (Coturnix japonica) y el gallo (Gallus gallus). Los tres pájaros están estrechamente relacionados y presentan un cariotipo compartido de 39 cromosomas. Un análisis filogenético comparativo de estos genomas sugiere que los genomas de la perdiz común y la codorniz japonesa se separaron hace aproximadamente 20 millones de años, mientras que el ancestro común de las dos especies divergió del gallo hace unos 35 millones de años.
Los resultados también señalan que el 13% de los genes anotados están asociados a funciones metabólicas, mientras que un 11% están implicados en el procesamiento de información ambiental, incluido el 9% dedicado a tareas de transducción de señales. El conjunto de genes exclusivos de la perdiz roja está significativamente enriquecido en genes relacionados con procesos virales (5 nada), regulación de la respuesta inmune (8 genes) y despolinización de microtúbulos (16 genes), relacionada con la eliminación de células en división.
Alves ha subrayado que el análisis de enriquecimiento genético “sugiere” que la perdiz roja desarrolló un conjunto diferente de genesreguladores y proteínas de respuesta viral, probablemente modelados por infecciones y presiones específicas de la especie. Esta investigación, representa un “avance significativo” hacia la creación de un genoma de referencia completo para esta especie, ha añadido al catedrático de Ciencia Animal de la UdL, Jesús Nadal. Este recurso genómico se convierte en una herramienta “inestimable” para la identificación, gestión, protección y conservación de la perdiz común silvestre, facilitando la implementación de medidas de gestión más precisas y fundamentadas. También proporciona una base sólida para futuras investigaciones sobre la evolución y adaptación de las especies, tanto en sus hábitats naturales como en cautividad, sostiene Navidad.