El Obert del Centre Històric de Lleida acaba a lo grande

La decimoquinta edición del Obert del Centre Històric de Lleida bajó ayer el telón después de tres días frenéticos de actividades y eventos y con un buen nivel de público, pese a que la jornada del sábado estuvo marcada por la lluvia. El día de ayer arrancó con la segunda edición del Mercat de la Resurrecció en el Mercat del Pla, un evento en el que cualquier ciudadano podía poner a la venta aquellos productos que tiene en casa y que no usa. Hubo una treintena de paradistas y mucho público durante toda la mañana. También destacaron las visitas guiadas por la Catedral, la Seu Vella y el Centre d’Art La Panera y puertas abiertas en el Museu de Lleida y el Dipòsit del Pla de l’Aigua, además de un desfile de vehículos históricos por las calles del Barri Antic. Paralelamente, la compañía La Baldufa Embolic a la granja, teatro familiar, en la plaza l’Ereta, y en la del Dipòsit se pudo visitar la instalación artística interactiva Streetlab violeta del colectivo Instantropia.

Por la tarde, el grueso de las actividades se trasladaron a la plaza Cervantes, que acogió un espectáculo de danzas del mundo a cargo de diferentes asociaciones y colectivos de la capital, que también ofrecieron una muestra gastronómica intercultural, además de un mercado solidario a cargo de Mans Unides y la actuación teatral Els músics de Bremen de la compañía Xip Xap. El broche de oro del Obert lo pusieron la actuación de música y danza africana del grupo Djilandiang, y en la Seu Vella se recrearon las bodas reales de Ramon Berenguer IV con Petronila de Aragón, enlace que supuso la creación de la Corona de Aragón.